Decenas de trabajadores de la administración de Justicia en Navarra, convocados por CCOO, CSIF, STAJ, ELA, LAB y UGT, han escenificado este viernes en Pamplona el entierro de la Justicia, con el objetivo de mostrar su rechazo a la reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ) del Gobierno central.

Los empleados se han agrupado frente a las puertas del Palacio de Justicia, minutos antes de que diese comienzo el acto de celebración del 25 aniversario del Tribunal Superior de Justicia de Navarra.

En representación de los sindicatos convocantes, Maite Soro (CCOO) ha afirmado que ellos no tienen "nada que celebrar" porque la reforma de la LOPJ "va a suponer la supresión de miles de trabajo, la privatización de registros civiles y la supresión de juzgados de paz".

Además, Soro, en declaraciones a los periodistas, ha señalado que "los actos de comunicación que realizan los funcionarios de Justicia se van a poder realizar por procuradores, con lo que va a haber una justicia de primera y de segunda categoría, en función de lo que se pueda pagar".

Por otro lado, la delegada de CCOO ha criticado que "con este anteproyecto de ley, el servicio público de la justicia tal y como se entiende no queda garantizado para nada".

Por ello, los sindicatos han entendido que este viernes "no es momento de celebraciones y sí de entierro de la justicia, de los registros públicos y de la justicia de cercanía, porque se suprimen todos los juzgados de paz y se pueden suprimir los partidos judiciales en Navarra, quedando sólo el de Pamplona". "Nosotros vamos a intentar por todos los medios que se eche para atrás esta reforma", ha añadido.