Un informe del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas reconoce una rebaja de 19 millones de euros de deuda viva en la Diputación de Lleida desde el año 2011 hasta el 2013 al situarse en 63 millones, la cifra más baja de las diputaciones catalanas, según los datos facilitados este viernes por la institución leridana.

El presidente de la Diputación de Lleida, el convergente Joan Reñé, ha explicado al finalizar el pleno de la institución que su objetivo es continuar rebajando la deuda tal y como se ha ido haciendo desde 2011 a fin de llegar a menos de 60 millones de deuda a finales de este año y situarla en 50 millones en 2015.

Según los datos del Ministerio, facilitados por la Diputación de Lleida, la deuda viva al finalizar diciembre de Barcelona se situaba en 133 millones; la de Girona en 69 y la de Tarragona, en 73,1.

La gestión austera y rigurosa del presupuesto ha permitido recuperar 5,7 millones de euros del superávit de 2013 y destinarlos a inversiones en actuaciones en carreteras, vías públicas, parques y jardines, saneamiento, promoción turística y protección del patrimonio histórico, según un comunicado de la institución.

La Diputación de Lleida argumenta que podrá hacer nuevas inversiones en el territorio porque dispone de remanentes ahorrados del ejercicio 2013, cumple la regla de estabilidad presupuestaria y tiene un endeudamiento muy por debajo del máximo que establece la ley.

Según Reñé, esta situación económica permite que el pleno de este viernes haya podido aprobar destinar 5,7 millones de euros de superávit presupuestario en diferentes actuaciones, tanto en carreteras, vías públicas, en patrimonio, promoción turística y protección del patrimonio histórico, entre otros.

Reñé ha explicado que esta reducción del endeudamiento ha sido posible gracias a un "criterio estricto de priorización" basado en una atención absoluta a los ayuntamientos y, en especial, a la contención del gasto corriente de la institución.