El PP se niega a reprobar en el Congreso al delegado del Gobierno en Euskadi por "obsesiones" y "fobias" del PNV

Los nacionalistas vascos acusan a Urquijo de creerse su papel de "guerrero del antifaz" en su determinación de "hacer cumplir la ley"
Aitor Esteban, portavoz del PNV
Aitor Esteban, portavoz del PNV
EUROPA PRESS
Aitor Esteban, portavoz del PNV

El PP ha rechazado este martes en el Pleno del Congreso una moción del PNV que instaba al Gobierno de Mariano Rajoy a destituir a su delegado en el País Vasco, Carlos Urquijo, porque, a su juicio, su demanda responde a las "obsesiones" y "fobias" de los nacionalistas vascos por la presencia del Ejecutivo en su territorio.

El portavoz del PNV en la Cámara Baja, Aitor Esteban, ha defendido en la tribuna del hemiciclo la necesidad de apartar de su cargo a Urquijo, quien, a su juicio, se ha "creído" su papel de "guerrero del antifaz" por estar dedicándose a "hacer cumplir la ley" con "continuas" declaraciones "partidistas", por utilizar la Delegación del Gobierno como una "organización de censores", por poner "trabas" en el camino "a todas las iniciativas que no son de su gusto" y por "excederse" en la presentación de recursos contra instituciones vascas.

La moción de los nacionalistas vascos ha sido rechazada por el PP y por Unión, Progreso y Democracia (UPyD), mientras que el PSOE ha optado por la abstención, y, por contra, ha logrado el apoyo de CiU, la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA) y Amaiur.

Amaiur le acusa de "pirómano"

Este último partido ha llegado a presentar sin éxito una enmienda pidiendo directamente eliminar la figura del delegado del Gobierno en aquellas comunidades que así lo soliciten, como así se aprobó recientemente el Parlamento vasco con el "pirómano" de Urquijo, porque algunos de los delegados que han sido destinados en Euskadi en los últimos tiempos, según ha denunciado, se han dedicado a "delinquir" o a "tensionar" a la sociedad vasca.

Desde CiU, su diputada, Montserrat Surroca, ha mostrado su respaldo a la moción del PNV y ha comparado la situación de Urquijo con la que dice que sufren los catalanes con la delegada del Gobierno en esa comunidad, María de los Llanos de Luna, quien se dedica, según ha dicho, a "dificultar" el día a día en las relaciones intergubernamentales en lugar de "fomentar" la cooperación.

En nombre de IU-ICV-CHA, Ricardo Sixto ha manifestado su apoyo a la iniciativa del grupo parlamentario que capitanea Aitor Esteban tan sólo comentando que Urquijo no es el único delegado o subdelegado que se merecería el cese que se reclama.

Sin embargo, pese a estos apoyos, el texto del PNV no podía salir adelante porque tanto el PP como UPyD estaban en contra. El portavoz adjunto de los 'populares' en el Congreso, Leopoldo Barreda, ha respaldado a Urquijo en sus actuaciones, "le guste o no le guste" al PNV, y ha apuntado que aunque la moción da para "poco debate político", sí permite identificar las "fobias" del nacionalismo vasco.

"El delegado del Gobierno cumple sus funciones frente al incumplimiento contumaz de determinadas instituciones vascas", ha manifestado el diputado vasco del PP, antes de acusar al PNV de hacer "el caldo gordo a los de siempre", en referencia a la izquierda abertzale.

Es una demanda "impropia"

El diputado de UPyD Carlos Martínez Gorriarán ha justificado el rechazo al texto de los nacionalistas vascos porque considera "impropio" solicitar la reprobación en el Congreso del delegado en Euskadi, una función que corresponde en exclusiva a quien lo ha nombrado, esto es, al Gobierno.

Además, ha cuestionado que el PNV se "escandalice" con el proceder de Urquijo y, sin embargo, no lo haga con actuaciones como los homenajes a etarras por parte de algunos ayuntamientos o que se "abuse" de medidas en favor del euskera en detrimento del castellano.

Desde el PSOE, el diputado vasco Odón Elorza ha anunciado que el PSOE se abstendría en la votación de esta moción argumentando que no iba a entrar en la "guerra de protagonismo" entre el PNV y Amaiur para ver "quién es más duro" contra Urquijo.

Pero también porque el PSOE no quiere entrar en esta especie de "persecución" contra el delegado del Gobierno pese a reconocer los "errores" que ha cometido durante su gestión. "Dialoguen con el Gobierno y busquen la manera de llevar una relación mucho más correcta entre ambos ejecutivos", les ha recomendando a los nacionalistas vascos.

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