El PNV planteará el próximo martes en el Pleno del Congreso la reprobación del delegado del Gobierno en el País Vasco, Carlos Urquijo, cuya destitución reclaman porque le acusan de estar sometiendo a un "acoso permanente" a la Administración vasca a través de sus "continuos" requerimientos y recursos contra actuaciones de ayuntamientos de esta comunidad.

Los nacionalistas vascos recogen esta demanda en la moción que defenderán el próximo martes en el Pleno del Congreso y que es consecuencia de la interpelación que dirigieron el pasado miércoles al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro.

En su iniciativa, que recoge Europa Press, el portavoz parlamentario del PNV, Aitor Esteban, recuerda que los delegados del Gobierno, de acuerdo con la legislación, debe tener como prioridad el mantenimiento de una relación de "cooperación" y "entendimiento" con las instituciones de la comunidad autónoma, lo que implica el "diálogo" y la "generación de confianza".

Tensión "insostenible"

Algo que los nacionalistas vascos no perciben con Urquijo, cuya actuación, según apuntan, está convirtiendo lo que debería ser un clima de cooperación "en una sensación de acoso permanente". "Actitud que puede ser interpretada como acorde a las instrucciones dadas por el Gobierno, pues es a él a quien corresponde fijar la línea de trabajo de su delegado", añaden.

En su texto, el PNV denuncia que la "tensión" está llegando a cotas "insostenibles" debido a los "continuos" requerimientos a ayuntamientos y otras instituciones vascas y la interposición de recursos, muchos de ellos "obviando" la legislación "plenamente constitucional" aprobada por el Parlamento vasco relacionados con la cooficialidad lingüística o incluso la propia del Estado en cuanto al régimen retributivo de los funcionarios.

Pese a que el Gobierno insiste una y otra vez en que Urquijo no hace más que velar por cumplir y hacer cumplir la ley, el PNV recalca que una cosa es lo que constitucionalmente le atribuye la vigente legislación y otra "muy distinta" es que la figura del delegado se conciba desde el Ejecutivo como un "censor" de las acciones que realizan otras administraciones en las autonomías.

"dispara a todo lo que está a su alcance"

Según la moción, el delegado del Gobierno debe "respetar y cumplir" en y desde la Administración que dirige el ordenamiento jurídico "en su totalidad", lo que implica no sólo la normativa del Estado, sino la normativa autonómica correspondiente". Algo que el PNV considera que no hace Urquijo, al que también censura sus declaraciones públicas "partidistas".

"Como un mal cazador, dispara a todo lo que hay a su alcance —resumió Esteban esta semana en el Pleno—. La única legislación que atiende es la del Estado, de la de la comunidad autónoma pasa olímpicamente. Su labor no debería ser convertirse en un perro de presa encargado de vigilar e incordiar ruidoso y aullador sin ofrecer ningún diálogo a las administraciones".

Los nacionalistas vascos creen que el delegado del Gobierno en Euskadi ha "transgredido" los principios para los que fue nombrado y, por lo tanto, piden que sea relevado de su cargo por no ser "la persona adecuada" para realizar las funciones que le encomienda la ley.