El consejo rector de la Casa de la Provincia, organismo autónomo de la Diputación de Sevilla, celebra este martes una reunión al objeto de analizar la decisión de su vicepresidenta, Margarita Gutiérrez, de poner su cargo a disposición del presidente de la Diputación, Fernando Rodríguez Villalobos, al haber sido condenada a ocho años de inhabilitación por un delito contra la ordenación del territorio.

Margarita Gutiérrez (PSOE), como es sabido, ha sido condenada a ocho años de inhabilitación para empleo o cargo público por un delito contra la ordenación del territorio, extremo que le ha llevado a renunciar a la Alcaldía de Gerena, municipio que gobernaba en minoría, y poner su cargo de vicepresidenta de la Casa de la Provincia a disposición del presidente de la Diputación provincial, extremo que revisará este martes el consejo rector de la Casa de la Provincia.

La sesión del consejo rector de la Casa de la Provincia, en cualquier caso, se celebrará un día después del pleno programado por el Ayuntamiento de Gerena para dar cuenta de la renuncia de Margarita Gutiérrez a la Alcaldía, toda vez que Gutiérrez ha decidido, de otro lado, recurrir la sentencia condenatoria. Gutiérrez, de cualquier modo, adopta esta decisión "convencida de que es la mejor opción, para defender con mayor ahínco mi inocencia, ante lo que considero una sentencia injusta".

Villalobos defiende a margarita gutiérrez

Rodríguez Villalobos, por su parte, ha defendido "la conducta ejemplar de Margarita en todo este asunto, porque primero renuncia en su Ayuntamiento y ahora pone su cargo en Casa de la Provincia a disposición del presidente, todo con objeto de dejar al margen del proceso judicial a las instituciones".

"Es una conducta ética irreprochable que dice mucho de la valía de la persona y que, además, debería servir de ejemplo para que tomaran nota muchos de los que acusan sin mirar las corruptelas que guardan en sus filas", ha remarcado Villalobos.

No obstante, en referencia a la condena de la hasta ahora regidora de Gerena, el presidente de la Diputación ha querido apostillar que "en el ejercicio del cargo público, cuando se incurre en ilegalidades, hay conductas espurias y corruptelas y hay otras que llegan desde el afán de servir al vecino y, aunque las dos no se ajustan a la ley, no debería ser juzgado mediática y socialmente igual un acto que otro".

En este sentido, Villalobos ha lamentado "los juicios sumarísimos que a veces hacemos desde la sociedad y desde los medios de comunicación ante sentencias condenatorias que, como es este caso, aún no es firme y va a ser recurrida".