Castilla y León cuenta actualmente con unos 1.700 vehículos propulsados por autogás, un combustible de gases licuados que es menos contaminante y más barato que el gasóleo o la gasolina.

Así lo ha señalado el delegado territorial de Repsol en Castilla y León, Guillermo Méndez, quien ha asistido en Salamanca a la presentación de nuevos vehículos de autogás que se han incorporado a la flota de la empresa concesionaria municipal para el mantenimiento de parques y jardines de la ciudad.

Según el responsable de la entidad energética en la Comunidad, el número de coches con posibilidad de utilizar este combustible se irá incrementando y Repsol estima que llegará a los 3.000 a finales de 2015.

En cuanto a las estaciones adaptadas para surtir autogás, son 19 en la Comunidad y se incorporarán otras cinco durante el presente año. Actualmente, las provincias con un mayor número son León, Burgos, Valladolid y Salamanca, con tres cada una de ellas.

Guillermo Méndez ha señalado que cualquier coche de gasolina y matriculado posteriormente a 2001 se puede adaptar para hacer uso de este combustible y los concesionarios ya ofrecen vehículos que directamente lo utilizan.

En cuanto al precio de estos vehículos nuevos propulsados por autogás, el delegado territorial de Repsol en Castilla y León ha informado que cuestan "algo más o, incluso, lo mismo" que cualquier utilitario de gasolina y menos que los diesel.

Respecto al ahorro, Guillermo Méndez ha destacado que el consumo de este producto menos contaminante también es menor y que produce un ahorro del 40 por ciento en comparación con un modelo similar de gasolina y un 20 por ciento si se contrapone con uno de gasóleo.