Aunque las estadísticas no revelan si los acosadores también son varones, suele ser el caso, como asegura Yahoo citando al portavoz de la EEOC, puesto que es raro en ese país que un hombre presente cargos contra una compañera o una superiora.

Como cuenta la publicación, no se trata de que ahora exista más hostilidad en el ambiente laboral, sino de que desde 1998 el Tribunal Supremo reconoce el acoso laboral entre personas del mismo sexo, lo que ha hecho crecer el número de denuncias.

Curiosamente, y contrariamente a lo que podría pensarse, la Comisión señala que la mayor parte de los agresores y agredidos son heterosexuales, y que por lo que protestan la mayor parte de denunciantes es por la existencia de códigos rígidos de masculinidad, que abusan de la mofa y del sarcasmo, y que ellos consideran intolerables.