Ángela Gracia, una matrona jubilada de 64 años, es una de las afectadas.

 

 

Cuando me jubilé, a los 60 años, sabía que me quedaría una pensión del 60%, a la que se añadía un complemento fijo de 448 euros. Sin embargo, el 31 de enero, sin previo aviso, me disminuyó en 150 euros. Es decir, ahora cobro lo mismo que cuando me jubilé.

 

 

Por ahora no mucho porque mi marido trabaja. Sin embargo, mi pensión se irá reduciendo progresivamente hasta que, dentro de unos años, desaparezca el complemento. Será entonces cuando empiece a tener problemas reales. Aunque a otros compañeros les ha ido peor.

 

 

En algunos casos, la pensión se ha reducido hasta en 600 euros. Es el caso de enfermeras de más de 80 años que dedicaron toda su vida a la sanidad.

 

 

Todavía no nos ha recibido la consejera. El gerente nos aseguró que si el resto de comunidades retiraba la iniciativa, ellos también lo harían.

 

 

Ejerció de matrona durante 39 años. Ahora tiene 64 y ve peligrar su pensión, que ya se ha reducido en 150 euros.