El armador del pesquero 'Mar de Marín', Francisco Freire, ha defendido este miércoles la profesionalidad del patrón de guardia que guiaba el arrastrero en el momento en que éste colisionó contra un mercante y se fue a pique, y ha subrayado que si hizo alguna maniobra "rara o extraña, tiene que haber una explicación".

En declaraciones a los medios, Freire ha insistido en que "lo que no se sabe es porqué el patrón actuó como actuó", en referencia a la principal hipótesis de la investigación: que el pesquero maniobró de forma errónea y colisionó contra el 'Baltic Breeze'.

"Llevaba en el barco siete años, era un hombre responsable, un buen patrón", ha indicado a la salida del cuartel de la Guardia Civil. Posteriormente, tras declarar en la Capitanía Marítima, Francisco Freire ha vuelto a insistir en "la experiencia" y profesionalidad del patrón.

"Si en algún momento nos parece que hizo una maniobra extraña, estoy seguro de que tiene que haber una explicación, pero yo no la sé", ha repetido y ha pedido esperar a los resultados de la investigación.

Por otra parte, ha confirmado que en la tarde de este miércoles tendrá lugar las honras fúnebres por los dos marineros gallegos fallecidos en el naufragio (un vecino de Cangas y otro de Barro), y que el tercer fallecido, un hombre marroquí, ha sido embalsamado y se está tramitando la repatriación a su país de origen.

INVESTIGACIÓN

Mientras, la Comisión de Investigación de Accidentes Marítimos sigue recabando información sobre el siniestro y pruebas materiales que, junto con las declaraciones de los supervivientes, serán analizadas para esclarecer las causas del naufragio.

La principal hipótesis con la que se trabaja es que la colisión entre el 'Mar de Marín' y el 'Baltic Breeze' fue fruto de un error humano por parte del patrón del pesquero.

Según ha trascendido, el arrastrero maniobró de forma errónea, desoyendo las indicaciones del centro de control de tráfico marítimo del puerto vigués, y colisionó con el mercante.

Como consecuencia del impacto, el 'Mar de Marín' zozobró y sólo cinco de sus diez ocupantes pudieron ponerse a salvo. Tras rescatarse tres cadáveres, se mantiene el dispositivo de búsqueda de los dos marineros que permanecen desaparecidos.

Además, los remolcadores 'Don Inda' y 'Sar Gavia' han iniciado los preparativos para hacer una primera inmersión en la zona del hundimiento con un robot y una campana.