El concejal de Seguridad y antes de Medio Rural en el Ayuntamiento de Santiago, Luis Bello, ha defendido que, "por ahora, nunca nadie" le ha llamado a declarar, pese a que la jueza que instruye la Operación Pokémon, Pilar de Lara, sospecha que trabajadores de Aquagest se "concertaron" con funcionarios y concejales, entre ellos él mismo, para conseguir una adjudicación. Además, Vigilancia Aduanera solicitó que se citase como imputado a este edil por otro contrato municipal.

"Yo siempre dije que lo que quiero es dejar trabajar a la Justicia, de lo que se habla es de algo que ocurrió hace un año y medio y, por ahora, nunca nadie me llamó", ha manifestado Luis Bello al ser preguntado sobre si teme ser reclamado por la Justicia como imputado a raíz del contenido sumarial que ha trascendido con la nueva entrega de tomos. "Lo único que puedo decir es que trabaje la Justicia", ha abundado.

Preguntado sobre el contenido del informe, Bello ha declinado "hacer valoraciones sobre eso" y, al ser interpelado sobre si defiende el proceso de adjudicación, Luis Bello se ha limitado a decir: "Los informes de Vigilancia Aduanera dicen eso, pero...; yo no voy a hacer declaraciones sobre ese tema".

La titular del Juzgado número 1 de Lugo considera, a raíz de informes de Vigilancia Aduanera, que el concejal de Santiago Luis Bello pactó con técnicos de Aquagest la adjudicación de dos obras. Los supuestos delitos que se habrían cometido en esos procesos serían de "blanqueo, fraude, exacciones ilegales, tráfico de influencias, uso de información privilegiada e intervención fraudulenta en contrataciones públicas".