El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha defendido que la Policía actuó en la protesta del sector del cerco que tuvo lugar este martes ante la Cámara autonómica "de acuerdo con los protocolos" habilitados para casos de "violencia" y ha advertido de que ni ésta "ni las botellas ni las quemas" son "argumentos" admisibles, pese a que ha asegurado "entender" los problemas de los marineros.

Preguntado por la carga policial, Feijóo ha respaldado la actuación de los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, para los que ha pedido "respeto", al igual que para sus familias, después de recordar que hubo ocho heridos. "Salir de casa para trabajar y volver herido es algo que no merece ninguno", ha manifestado.

"Las botellas, las quemas y la violencia no son argumentos para ningún gallego ni de ningún sector", ha aseverado el mandatario autonómico, en la rueda de prensa posterior al Consello de la Xunta, en la que ha incidido en la división que hay dentro del propio sector y ha reivindicado el trabajo "callado" realizado por su Ejecutivo.

A modo de argumento, ha esgrimido las negociaciones que posibilitaron que la cuota de caballa para la flota gallega del cerco se incrementará en 1.450 toneladas este año, hasta 3.400, mediante un acuerdo alcanzado entre la Comisión Europea, las Islas Feroe y Noruega.

En esta coyuntura, ha instado a los miembros del sector del cerco a "ponerse de acuerdo" entre ellos y ha manifestado que "la mano sigue tendida" para el diálogo y las puertas de la Consellería do Mar "abiertas", toda vez que —ha defendido— "nunca estuvieron cerradas".