La Sección Segunda de la Audiencia de Málaga ha fijado inicialmente para enero de 2015 el inicio del juicio por una supuesta trama relacionada con operaciones de narcotráfico, procedimiento en el que están acusados varios guardias civiles, entre ellos el que era jefe del Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) del instituto armado en Málaga.

Así, según una diligencia de ordenación, a la que ha tenido acceso Europa Press, la previsión sería comenzar la vista oral el 19 de enero, mes en el que se celebrarían cuatro sesiones. En este sentido, la intención es celebrar juicio los lunes y martes hasta julio, con ocho sesiones en febrero, 10 en marzo, seis en abril, ocho en mayo, 10 en junio y cuatro en julio.

Asimismo, la Sala ha emitido ya el auto en el que se admiten o no las pruebas solicitadas por las partes para practicar en el juicio oral. El Juzgado de Instrucción número 11 de Málaga, que se encargó de la investigación de esta causa, abrió el pasado año juicio oral contra 40 personas, tras los escritos de acusación presentados por la Fiscalía y la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC).

El ministerio fiscal acusó a 39 personas, en general por los delitos de encubrimiento, revelación de secreto, robo, proposición para cometer delitos de tráfico de drogas, contra la salud pública, blanqueo y cohecho, entre otros. Así, además del teniente, exjefe del EDOA, acusó a un sargento del mismo equipo y a otras 37 personas, entre ellas una letrada, pareja de éste último.

Esta parte también acusó a otros tres agentes de la Benemérita y a algunos presuntos traficantes o colaboradores. Así, para el teniente, la acusación pública pidió en su escrito de conclusiones provisionales más de 30 años de prisión por delitos como revelación de secreto, contra la inviolabilidad del domicilio, contra la salud pública o malversación de caudales.

En cuanto al sargento, el fiscal solicita más de 50 años, añadiendo a los delitos anteriores otros como el blanqueo de capitales o el cohecho. En su escrito provisional, con 16 hechos delictivos, el fiscal describe dos operaciones contra el narcotráfico en Málaga y en Marbella; en las que supuestamente habrían participado estos dos exresponsables del instituto armado.

En algunos casos, según se desprende de las intervenciones telefónicas, contactaban con personas que iban a robar alijos de drogas y habrían acordado un operativo para que esos contactos se quedaran con parte del cargamento. Además, según el fiscal, el sargento acusado presuntamente colaboraba con personas de redes que introducían droga desde Marruecos, dando "cobertura y seguridad".

En cuanto al teniente, la Fiscalía señala que tenía contactos con confidentes y lo acusa de que supuestamente les avisaba de investigaciones que realizaban otros cuerpos, además de que impedía que dichas pesquisas continuaran. Además, se sostiene que, por las conversaciones existentes, éste "controla" al menos una de las operaciones de tráfico de droga que se relatan.

La acusación particular, representada por la AUGC, personada por primera vez en una causa contra miembros de la institución, acusa a un excapitán de la Guardia Civil, al que, sin embargo, no incluye la Fiscalía malagueña, al considerar esa parte que habría tenido participación en uno de los hechos descritos en sus conclusiones provisionales, presentadas en su momento en el juzgado.