La mujer que ayer asesinó a sus cinco hijos en Bélgica y después intentó suicidarse, la ex profesora de matemáticas Geniève Lhermitte, de 41 años, se encuentra hospitalizada pero fuera de peligro, según informa hoy la prensa local.

El país está conmocionado por el quíntuple asesinato perpetrado en Nivelles (al sur de Bruselas) de Yasmine, nacida en 1992, Nora (1995), Myriam (1997), Mina (1999) y Medhi (2003), y sus fotografías ocupan hoy la primera página de varios diarios.

Los cadáveres de los menores, a los que se practicará la autopsia en las próximas horas, fueron encontrados en sus respectivas habitaciones después del aviso que hizo la presunta parricida al teléfono de emergencias en torno a las 14.45 horas.

Al parecer, la mayor, Yasmine, opuso resistencia al ataque de su madre, a quien los vecinos describen como "amable, educada y amante de sus hijos".

Según la versión de una de sus hermanas, la mujer, que se encontraba en tratamiento por depresión, había abandonado su trabajo como profesora de matemáticas al contraer matrimonio con el marroquí Bouchaib Mokadem.

Asistencia psicológica para el marido

Algunos diarios publican que Mokadem no había estado en su casa desde el pasado mes de diciembre, y que ayer tuvo que recibir asistencia psicológica a su llegada a la localidad de Nivelles.

Los vecinos aseguran que sus ausencias eran habituales debido a los viajes que efectuaba como representante de productos farmacéuticos o como vendedor.

Por este motivo tampoco era muy conocido en el barrio, al que se habían trasladado hacía cinco años.

Trágico episodio

Ayer su mujer mató a sus cinco hijos, cuatro niñas y un niño de entre tres y 14 años, y después intentó suicidarse.

Tras degollar a los niños con un cuchillo, intentó quitarse la vida y después llamó por teléfono a los servicios de socorro, y dejó dos notas manuscritas en la puerta de su casa con el mensaje "llamar a la policía".

La presunta asesina había enviado una carta a su mejor amiga en la que le informaba de la atrocidad que planeaba cometer, según algunos medios, ayer por la mañana y, según otros, el pasado viernes.

Los cuerpos fueron hallados por un policía, que tuvo que recibir asistencia psicológica debido a la fuerte impresión que sufrió.

La jueza de instrucción Anne-Françoise Destrée, desplazada al lugar de los hechos, ordenó abrir una investigación.