Asociaciones como Manaia consideran esto una «discriminación», ya que el Centro Chino de Adopciones informó en su momento de que hasta el mes de mayo continuarán aceptando expedientes que cumplan las normas, incluyendo los de las familias monoparentales, hasta agotar el cupo previsto. «En otras comunidades autónomas se están siguiendo estas indicaciones, por lo que tratan de agilizar los trámites para cumplir con la fecha fijada. No entendemos por qué aquí no», argumenta el vicepresidente de Manaia, Juan Masse, que califica esta diferencia como «un agravio comparativo».

Otro de los cambios que está a punto de producirse en los procesos de adopción en Galicia se encuentra en las necesarias entrevistas de idoneidad. La Xunta pretende externalizar la realización de informes a través de la posible firma de un convenio con el Colegio de Psicólogos y el Colegio de Trabajadores Sociales. «Lo importante es que se haga bien, con garantías reales y uniformes, porque lo prioritarios es garantizar los intereses de los menores», indica Juan Masse.

El Gobierno Central aprobó este mes el anteproyecto de ley para la adopción internacional, que disipará las dudas y reticencias de futuros padres.

Etiopía y Nepal: nuevos destinos

El país del sol naciente era, hasta ahora, el destino preferente para prohijar niños desde Galicia. Desde 2005 otros nombres que están sonando también con fuerza son: Etiopía, Nepal y Colombia. Más de 200 niños llegaron a la comunidad gallega, procedentes de estos países, el pasado año. «Países para adoptar hay muchos, lo que ocurre es que cada uno tiene sus características y requisitos. Nosotros en la asociación tenemos a una futura madre que va a adoptar en Kazajistán (ex república soviética)», comenta Juan Masse.