El Ayuntamiento de Málaga comprará viviendas para destinarlas a familias en riesgo de exclusión social

Convocará un concurso público en marzo y se prevé que los pisos, por los que no pagará más de 50.000 euros, estén adquiridos en mayo
Francisco Pomares y el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre
Francisco Pomares y el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre
EUROPA PRESS
Francisco Pomares y el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre

El Ayuntamiento de Málaga va a comprar viviendas privadas para destinarlas a familias en riesgo de exclusión social. Para ello, este año contará con una partida de 500.000 euros y convocará a lo largo del mes de marzo un concurso público, previendo que los inmuebles estén adquiridos en mayo.

Una iniciativa que ha presentado este jueves el alcalde, Francisco de la Torre, junto al concejal de Ordenación del Territorio y Vivienda, Francisco Pomares, y que nace con vocación de continuidad y con el propósito de "meter el hombro y marcar una línea de trabajo" que, a su juicio, "debería ser estudiada, seguida y aplicada desde la administración competente, que es la Junta de Andalucía".

"Es una línea muy interesante de explorar, muy rápida, muy limpia, nada conflictiva y relativamente barata porque el mercado ahora está más bajo, que, además, estimula el mercado; queremos sumar soluciones y no crear nuevos conflictos", ha indicado. En este punto, ha recordado al Gobierno andaluz que hay líneas de fondos europeos que podrían ser utilizadas en esta dirección.

El regidor del PP ha lamentado, al respecto, que la actuación autonómica en esta materia "ha ido a menos y es prácticamente nula", habiendo construido el Ayuntamiento "más de 5.000 viviendas, aunque no esté en nuestro ámbito", y la Junta, sin embargo, "solo 36".

La partida de 500.000 euros que se asigna a esta actuación procede del Patrimonio Municipal de Suelo. El Consistorio no pagará más de 50.000 euros por vivienda, que deberán tener, por su parte, un mínimo de dos dormitorios, cocina, baño y salón, así como ser accesibles. Tanto las casas como las zonas comunes del edificio han de estar en buen estado de conservación, habitabilidad y accesibilidad.

Las viviendas podrán ser de nueva construcción o de segunda mano, aunque nunca con una antigüedad superior a los 50 años, tal y como ha señalado el alcalde, que ha especificado que su idea es "no gastarlas de una tacada, sino sumarlas a la que tengamos cada mes —cinco o seis habitualmente—".

Alquileres de entre 150 Y 200 EUROS

Los destinatarios han de ser familias con ingresos inferiores a 7.430 euros al año, que pagarían alquileres mensuales de entre 150 y 200 euros. En definitiva, "serán los casos más dramáticos", ha dicho De la Torre, quien, no obstante, no ha sabido cuantificar la demanda actual.

El objetivo, ha resaltado, es que esta iniciativa complemente la política de construcción directa por parte del Ayuntamiento, que, en la actualidad, tiene en ejecución 84 viviendas, más la rehabilitación, cantidad a la que se sumarían, por tanto, con esta nueva acción "como mínimo otras 10, que pueden ser, sin embargo, 15 o 20". "No hay que poner límite al deseo de vender de la gente", ha apostillado.

Para la gestión de este plan está prevista la creación de una mesa de contratación específica y la apertura de una oferta pública de adquisición de vivienda a través de un concurso, al que podrán presentarse particulares y empresas.

Se abrirá un plazo de presentación de ofertas y, posteriormente, dicho órgano las valorará. El pliego para poner en marcha el concurso público está previsto que se apruebe en el mes de marzo para su posterior publicación.

Plan fres

Una vez que se adquieran los inmuebles, se destinarán al Plan Municipal de Viviendas para Familias en Riesgo de Exclusión Social (FRES). En concreto, se ofrecerán en régimen de alquiler social.

A través del Plan FRES el Ayuntamiento de Málaga busca apoyar a familias necesitadas y propiciarles el acceso a una vivienda digna en régimen de alquiler social. Desde su puesta en marcha a finales de 2011 se han adjudicado unos 200 pisos protegidos, gestionados por el Instituto Municipal de la Vivienda (IMV).

Los adjudicatarios han sido mayores de 65 años —en torno al 18,3 por ciento—, familias numerosas —13,5 por ciento—, monoparentales —en torno al 5,3 por ciento—, procedentes de ejecuciones hipotecarias —12,1 por ciento—, violencia de género —cerca de un 6,75 por ciento—, personas con movilidad reducida —20,3 por ciento— y cupo general —23,75 por ciento—.

En cuanto a la adjudicación, cada uno de los casos es analizado en el comité de valoración, que aglutina a las áreas de Derechos Sociales, Igualdad y Accesibilidad y al propio IMV. En dicho órgano se estudia la dificultad, la emergencia y la gravedad de la situación de estas familias, sin que sea necesario su ingreso en el Registro Municipal de Demandantes.

Este programa se dota de las viviendas que se van recuperando del parque municipal —unas cinco o seis al mes—. Al estar todas adjudicadas actualmente, se cuenta solo con las que vuelven por cuestiones como fallecimiento del adjudicatario, debido a que la familia se va a vivir a otra ciudad o por acceder a una casa en propiedad.

Apoyo social

Este plan se reforzará con la contratación de un equipo multidisciplinar compuesto por profesionales de la intervención social. El objetivo es proporcionar la oportunidad de facilitar un seguimiento personalizado y de ayuda a estas familias, estableciendo un tratamiento individualizado, con diferentes tipos de actuación, pero imperando siempre la igualdad de oportunidades, la lucha contra la exclusión social y sus derechos.

Actualmente, se está tramitando la próxima licitación de este servicio con un presupuesto inicial al año de 99.000 —IVA no incluido—.

En general, el parque de alquiler de viviendas que gestiona el Consistorio de la capital malagueña está compuesto por 2.302 pisos, a los que se suman los 1.400 de la Junta de Andalucía.

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