Los hurtos denunciados, los delitos y faltas más numerosos en Barcelona, han bajado un 2,3% en 2013 respecto al año anterior pero cada día se denunciaron una media de 264 robos (96.243). Esta cifra fue valorada por Mossos e Interior como «muy óptima», dado que la mayor parte se producen sobre el turismo, un colectivo cada vez más numeroso.

El descenso se debe a que, según afirmó este jueves el director de Mossos d'Esquadra, Manel Prat, «los grupos multireincidentes han desaparecido» y no delinquen en superfície ni tampoco se han desplazado al resto del área metropolitana, de Catalunya o del resto del Estado.

Prat expuso que se trata de "un fenómeno global" que ya se está dando en el resto de España y a nivel internacional. En Barcelona, la mayor parte de los casos se deben a "descuidos" que los ladrones aprovechan para robar teléfonos inteligentes, advirtió el jefe de la Guardia Urbana de Barcelona, Evelio Vázquez.

Por su parte, el comisario jefe de la Región Metropolitana de Barcelona, Joan Carles Molinero, elogió la "presión fiscal", que ha contribuido a alejar a los reincidentes.

En global, los delitos han bajado un 5% el último año en Barcelona. Los tirones se han reducido un 11,8%, registrándose 2.804 y los robos con violencia en establecimientos comerciales (671 en total, -18%), en la vía pública (135, -10%) y en domicilios  (135, bajaron un 25,8%) se redujeron también.

Los homicidios han seguido la tendencia a la baja y se registraron 12 el pasado año, lo que supone hasta un 48% menos que en 2010.

El jefe de la Guardia Urbana de Barcelona, Evelio Vázquez, advirtió que la mayor parte de los casos se deben a "descuidos" que los ladrones aprovechan para robar teléfonos inteligentes.

Ciutat Vella, uno de los distritos históricamente más conflictivos, logró registrar un descenso del 10% de los hechos delictivos. En concreto, hubo un 18,8% más de detenidos por cometer hurtos.

A la luz de los datos, Manel Prat elogió al que fuera comisario de Ciutat Vella hasta el viernes pasado, Enric Garcia Doñate, que fue relevado tras el caso Benítez. El director de los Mossos afirmó que "realizó una tarea magnífica en Ciutat Vella como los datos ponen de relieve" y argumentó que se procedió a su sustitución para buscar "otro perfil de liderazgo".