La Biblioteca CAI Mariano de Pano de Zaragoza ha recogido en 2013 más de mil kilos de alimentos de usuarios que devolvieron fuera de plazo libros, películas y juegos prestados. Esta recolecta es el resultado de la iniciativa que emprendió la Obra Social y Cultural de Caja Inmaculada hace un año y que consiste en eliminar las sanciones por devolver tarde el material de la biblioteca a cambio de que los usuarios penalizados entreguen alimentos no perecederos.

El destino final de los productos es el comedor social de la parroquia de Nuestra Señora del Carmen de Zaragoza, ha informado Caja Inmaculada (CAI) en un comunicado.

Hasta enero de 2013, las penalizaciones aplicadas por este concepto consistían en que los usuarios no podían utilizar el servicio de préstamo durante un periodo equivalente al número de días retrasados. De hecho, sigue siendo el sistema que tienen implantado la mayoría de las bibliotecas españolas.

La decisión de la Obra Social de Caja Inmaculada, "pionera en España, está teniendo una magnífica acogida por parte de los usuarios de la biblioteca, hasta el punto de que algunos de ellos donan alimentos incluso sin haber incurrido en retraso alguno", han indicado las mismas fuentes.

Otro ejemplo de la "gran respuesta" es que el transporte de los productos desde la biblioteca hasta el comedor social lo realiza semanalmente un usuario voluntario.

Para llevar a cabo la nueva medida, la biblioteca, situada en la calle Val-Carreres Ortiz, 12, de Zaragoza, establece una tabla de correspondencias dependiendo del grado de sanción.

Así, por un retraso de 5 a 7 días, el usuario debe entregar 1 kilo de alimentos; si es superior a 8 días, 2 kilos; si sobrepasa los 15 días, 3 kilos; y así sucesivamente. De esta forma, puede eliminar la penalización y volver a hacer uso del servicio de préstamo.