El Arzobispado de Santiago de Compostela ha pedido a sus párrocos de la archidiócesis gallega que veten como padrinos de bautizos a «pecadores notorios y a aquellas personas que han provocado escándalo público por su vida o conducta moral». Así aparece en el Boletín Oficial del Arzobispado santiagués, dirigido por Julián Barrio. En el texto, recuerda que para la elección de los candidatos a padrinos o madrinas «los padres no deben dejarse guiar sólo por razones de parentesco, amistad o prestigio social» para evitar convertir este acto en un «puro trámite». El Arzobispado aconseja, en casos de duda «sobre la idoneidad de los futuros padrinos», métodos de preparación como visitas a casa, entrevistas o catecismo. Además, precisa a los párrocos la prohibición de que asuman esta responsabilidad las parejas de hecho o los casados por la vía civil.