La cantante Paulina Rubio pospuso su boda en Cancún, en el Caribe mexicano, hasta resolver el litigio que mantiene con las autoridades fiscales mexicanas, que le embargaron cuentas y propiedades por una deuda de 530.000 dólares.

Fuentes de la organización de la celebración aseguraron a Efe que la artista pidió posponer la boda, porque "quería salir primero de un problema legal".

La boda de la artista mexicana con el empresario español Nicolás "Colate" Vallejo-Nágera estaba prevista para celebrarse a mediados de marzo próximo en un lugar exclusivo de Cancún.

Sin embargo, el problema con el fisco obligó a posponerla y la fecha se mantiene sin definir, indicaron las fuentes.

"No podemos dar los pormenores, pues nos pidieron mucha discreción respecto a la boda, pero inicialmente estaba programada para marzo próximo en Xcaret -el parque ecológico-, con la asistencia de unos 800 invitados", explicó uno de los organizadores.

La cantante tiene un litigio con la Secretaría (Ministerio) de Hacienda por una deuda fiscal de unos 530.000 dólares y pese a que desde hace tres años presentó una impugnación contra este cobro, las autoridades le embargaron cuentas bancarias e inmuebles.

"Antes de este problema, vino Paulina Rubio a Cancún, primero con su papá y luego con su novio para revisar personalmente los pormenores de la ceremonia a celebrarse en Xcaret", que es parte del conjunto de zonas arqueológicas de la civilización Maya, dijeron las fuentes.

Diversos medios de comunicación han divulgado varias versiones sobre los motivos de la supuesta "cancelación" de la boda de "La chica dorada".

El balneario mexicano de Cancún es escenario habitual de bodas de altos directivos, empresas y artistas nacionales e internacionales.

Otra boda anunciada y cancelada en este balneario fue la de Tom Cruise con la también actriz Katie Holmes en 2005, que iba a ser en un selecto complejo turístico de Cancún y que se celebró un año después en un castillo de Italia.

La celebración se suspendió por la llegada del huracán "Wilma", que en octubre de aquel año azotó las costas caribeñas mexicanas y provocó fuertes destrozos en esa zona turística.

El director general de la Oficina de Visitantes y Convenciones de Cancún, Artemio Santos, dijo que desde 2005 el balneario ha sido uno de los destinos predilectos para celebrar bodas y lunas de miel, con un índice de entre 25 y 30 ceremonias al mes.

Este año, las autoridades esperan obtener un ingreso de unos 30 millones de dólares por esas celebraciones.

Cancún cuenta con 147 hoteles que ofrecen servicios especiales para "luna-mieleros", 100 hoteles con instalaciones para bodas, cinco barcos, tres parques ecoturísticos y 10 iglesias.