La patronal del carbón, Carbunión, espera superar en 2014 la "grave crisis" del sector nacional gracias a la fijación por parte del Gobierno del mecanismo que garantizará un 7,5% de producción eléctrica con este mineral, que permitirá a su juicio dejar atrás un 2013 "tremendamente difícil".

En su balance del año, al que acompaña de las perspectivas para 2014, la patronal indica que la reforma eléctrica y el retraso en la entrega de las ayudas al sector marcaron el pasado ejercicio, en el que también se aprobó el nuevo marco para el periodo 2013-2018.

Las empresas han sufrido "interrupciones prolongadas en su actividad, reducciones de plantilla y situaciones de administración concursal en varios casos" en 2013, ejercicio en el que el carbón tuvo un peso del 14,6% en la matriz de producción de electricidad, cinco puntos por debajo del porcentaje alcanzado en 2012.

Esta caída "refleja un año repleto de dificultades para el carbón nacional", indica Carbunión, antes de recordar "las paradas de actividad en gran parte de las explotaciones, debido a los procesos jurídicos planteados por las empresas eléctricas" contra el desarrollo del decreto del carbón.

Esta situación, sumada al retraso en la liberación de las ayudas del año 2012 y la denegación para algunas empresas, contribuyó a los expedientes de regulación de empleo y a las situaciones concursales de varias empresas, que en el caso de Coto Minero Cantábrico acabó en un proceso de liquidación.

Carbunión aprovecha el balance anual para indicar que las cantidades que a menudo se mencionan como ayudas al carbón no van dirigidas en buena parte a las empresas mineras, sino que en su inmensa mayoría se destinan a pagar compromisos sociales con trabajadores, proyectos de creación de infraestructuras y equipamientos de diverso tipo, incluidos los turísticos.