La niña tiene 11 años y 60 el adulto que ha abusado sexualmente de ella. Pero el Tribunal Supremo italiano ha decidido anular la condena de cinco años de prisión dictada contra Pietro Lamberti al entender que su víctima está "enamorada", según publica el diario local italiano Il Quotidiano della Calabria.

La presunta historia de amor de esta insólita pareja habría comenzado cunado la familia de la niña, en situación de exclusión social, confió el cuidado de la menor a Lamberti, empleado de los servicios sociales de Catanzaro (Calabria).

En 2011, tras una ardua investigación policial, el hombre fue condenado a cinco años de cárcel por mantener relaciones sexuales con un menor de 14 años, pero la nueva sentencia anula la condena y obliga a que el juicio se repita.

El alto tribunal considera que en el fallo que envió al pederasta a prisión no se ha tenido en cuenta el "consenso" entre el adulto y la niña ni el hecho de la existencia de "una relación amorosa entre ambos" desprovista de "coacción física".

La prensa italiana asegura que el adulto mantuvo en secreto la relación con la menor, a la que le hacía prometer que no diría nada, "porque esto es un secreto que nos llevaremos a la tumba", le decía.

Y para que nadie sospechara de la relación, obligaba a la menor a mantener unas pautas de comportamiento: "No llames sábado y domingo , ya que esos días son para estar con la familia", le decía.

Pero el secreto fue finalmente descubierto por la policía italiana, que rastreó y pinchó centenares de conversaciones telefónicas entre ambos para acabar deteniéndole un día mientras mantenía relaciones sexuales con la niña.

La anulación de la condena ha desatado una ola de protestas en toda Italia al entender que el Supremo está validando y justificando a los pedófilos.