El coordinador regional de UPyD, Rafael Sánchez, ha lamentado el crecimiento del número de desempleados en 530 personas en la Región de Murcia durante el pasado mes de noviembre, situándose en 153.877 desempleados, un 0,35 por ciento más que en el mes de octubre, situándose como octavo mayor crecimiento en comunidades, según ha difundido este martes el Ministerio de Empleo y Seguridad Social.

Como explica Sánchez, aunque en el conjunto del país se ha producido una reducción del paro, la Región de Murcia se coloca entre las comunidades en donde ha vuelto a aumentar el número de desempleados, lo que se traduce en un mercado de trabajo "débil y frágil", que muestra sus "debilidades" cuando finaliza el verano, "dependiendo en exceso del sector servicios", donde el paro aumentó en 493 personas, con respecto a octubre, y que "arrastra un alto porcentaje de jóvenes parados".

En este sentido, ha vuelto a reclamar que se concreten y ejecuten con rapidez las actuaciones y las medidas para la activación del empleo juvenil que se aprobaron hace unos meses en la Asamblea Regional, aunque "creemos que tanto el diseño como las cifras que se aportaron para su dotación son claramente insuficientes". "Estos datos nos apuntan a la incompetencia del Gobierno regional para adoptar medidas que puedan generar empleo", ha criticado.

Igualmente, el coordinador regional de la formación magenta ha mostrado también su preocupación por el descenso del número total de contratos, en concreto 9.559, casi un 15 % menos que en el mes de octubre, situándose en 56.255 contratos totales.

De esta forma, Sánchez ha insistido de nuevo en la inutilidad de las políticas del PP y en particular de la reforma laboral "cuyo único logro, en palabras de Rajoy, es la devaluación interna que se está produciendo por la rebaja permanente de salarios".

Para concluir, Rafael Sánchez ha recordado que sólo el 7 por ciento de todos los contratos firmados en noviembre han sido de carácter indefinido. Por eso ha vuelto a insistir en la propuesta de UPyD para que se implante el contrato único indefinido, suprimiendo el agravio que suponen las dos categorías en las que se siguen encuadrando los trabajadores en España, una dualidad que afecta muy negativamente, de forma especial, a los jóvenes que acceden a un puesto de trabajo.