Grandes historias de amor: romances de película

Desde que Cupido comenzara a lanzar sus ciegas flechas de amor parejas de todo tipo y condición se han unido formando los más insólitos y memorables romances, algunos de ellos de cine, pero todos reales.
Humprey Bogart y Lauren Bacall en un fotograma de Tener y no Tener.
Humprey Bogart y Lauren Bacall en un fotograma de Tener y no Tener.
Humprey Bogart y Lauren Bacall en un fotograma de Tener y no Tener.
Laurent Bacall y Humprey Bogart

A Humprey Bogart y a Lauren Bacall los separaban 25 años de edad cuando se conocieron en Tener y no tener en 1945. Ella era una belleza debutante y él ya era una estrella consolidada en papeles de antihéroe con buen corazón que enamoraba por sus ojos tristes y su tumultuosa vida.

Tres matrimonios fallidos a sus espaldas y entonces llegó "flaca", Betty, o lo que es lo mismo, Laurent Bacall, como un ave de paso melancólica, que la definía el New York Times. Si no era con ella tal vez no fuera con nadie, que debió pensar Bogart, y a pesar de los impedimentos se casaron.

Ni la infidelidad de la actriz con "la voz" (Frank Sinatra ) ni los coqueteos de él con Marylin Monroe disolvieron esta pareja mítica que sólo se separó cuando Humprey falleció de cáncer de esófago en 1957. Más de una década de tener y no tener.

Melanie Griffith y Antonio Banderas

Una pareja muy nuestra es sin duda la que forman Antonio Banderas y Melanie Griffith. Un sueño en el que uno se acaba casando con la protagonista de las películas que ha visto en el cine.

El malagueño triunfó aquí, cruzó el charco y triunfó allí, en las américas. Y ella, hija de una diva cinematográfica, la hichtconiana Tippi Hedren, abandonó sus tumultuosas relaciones de separaciones y reconciliaciones con Don Jonson y se enamoró de nuestro Antonio en el rodaje de Two Much, donde bajo las órdenes de Fernando Trueba ambos se querían también dentro de la pantalla.

Separado de Ana Leza, Antonio y Melanie se casaron en Londres en 1996 y desde entonces ella no ha dejado de esforzarse por aprender el idioma natal de su marido para poder decirle "te quiero, Antonio".

Angelina Jolie y Brad Pitt

Sobre los más guapos de la gran pantalla se ha escrito y no poco. Al nuevo Robert Redford como se le llamó, le bastaron unos fotogramas en Telma y Louise para ganarse a público y directores y desde entonces no ha parado de trabajar, sin encasillarse en el papel de chico guapo.

El novio de América se divorció de Jennifer Aniston cuando conoció a la señora Smith, es decir a Anjelina Jolie en la comedia Mr y Mrs Smith.

Ella explosiva, salvaje y con una loable labor como embajadora de buena voluntad de Naciones Unidas, se había casado anteriormente de cuero negro, nada que ver con la idílica y blanca boda de él con Aniston.

Polos opuestos o tal vez no tanto, Brad reconoció legalmente a los dos hijos adoptados de Angelina, Maddox y Zahara y juntos han tenido a la pequeña Shilou . Y por las palabras de los actores parece que quieren tener tantos niños como para poder jugar al fútbol todos juntos como una gran y atípica familia feliz.

Isabel Preysler y Miguel Boyer

Nadie ponía la mano en el fuego por la relación entre la exótica mujer y el egiptólogo ex ministro de Economía y Hacienda. Ella se había casado anteriormente con el cantante Julio Iglesias, su descubridor, y posteriormente con Carlos Falcó, Marqués de Griñón. Isabel y Miguel coincidieron en la entrega de los conocidos premios Naranja, para ella, y Limón, para él, del periodismo en 1984. Y algo debió surgir porque poco después se casaron y desde entonces hasta hoy permanecen juntos formando uno de los matrimonios más discretos de la alta sociedad.

Pastora Vega e Imanol Arias

Pastora traía la fama de cuna, por algo fue la primera nieta de una grande de la copla como era Pastora Imperio. Por su parte, Imanol, de belleza canalla, enamoró a todas las mujeres de España en la década de los ochenta  en la serie Anillos de Oro.

Separado de su primera esposa, hace más de veinte años que comparte un papel en la vida con Pastora. Celosos de su intimidad y de su vida privada, la pareja, que tiene dos hijos, no se prodiga en los medios y forma una de las uniones más estables del celuloide español.

Letizia y Felipe de Borbón

Una versión moderna y urbanita del cuento de cincerella o como otros dijeron antes, El heredero de la corona y la periodista. Una historia de amor que surgió cuando menos lo esperaban algunos medios ansiosos por unir en matrimonio al hijo pequeño de los reyes.

Jóvenes, guapos y sobradamente preparados mantuvieron el noviazgo en secreto ya que en las casas reales no hay novias sino prometidas. "Estoy muy enamorado de Letizia" dijo el príncipe en su compromiso oficial ante los medios y los periodistas encantados porque además hablar con Letizia era como hablar con una compañera. La boda real se celebró en la Catedral de la Almudena y actualmente los Príncipes de Asturias esperan el nacimiento de su segunda hija.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento