Mbark El Jaafari, detenido el lunes por la Policía Nacional en Reus (Tarragona) por su relación con el terrorismo islamico, trabajaba de albañil, se entrenaba como boxeador y vivía solo en la localidad catalana a donde llegó hace un año.

El detenido vivía en una inmueble de la urbanización Sol-i-Vista donde se relacionaba poco con el vecindario. "Hacía una vida normal, venía de trabajar, iba a entrenar y a correr y después se metía en su casa", comentaba hoy un vecino.

La detención se produjo a primera hora de la mañana en plena calle, cerca del domicilio donde vivía El Jaafari.

Relacionado con Al Qaeda

El detenido formaba parte presuntamente de una célula terrorista conectada con Al Qaeda y con el Grupo Salafista para la Predicación y el Combate (GSPC) y se encargaba de reclutar jóvenes musulmanes para enviarlos como 'kamikazes' a Marruecos, Irak y Argelia.

Buscado en Marruecos Sobre él pesaba una orden internacional de detención emitida por Marruecos a raíz de su presunta vinculación con

La estructura terrorista a la que pertenece el detenido habría realizado desde el mes de mayo de 2006 labores para enviar a 32 'kamikazes' con el fin de cometer acciones terroristas suicidas en Irak y la planificación de operaciones en el interior de Marruecos.

El detenido vivía en España con todos sus papeles en regla.

Entrenador de terroristas

Mbark El Jaafari podría haber realizado entrenamientos terroristas en campos supervisados por la dirección de Al Qaeda en Afganistán en 2001. En las próximas horas pasará a disposición judicial.

Para la formación de 'kamikazes', la red utilizaba campos de entrenamientos dependientes del GSPC argelino, grupo que se encuentra en la actualidad al frente de una estructura que aglutina a todas las organizaciones terroristas del norte de África e integrada en la red Al Qaeda bajo la denominación 'Al Qaeda en el Magreb'.

Según la Policía, esta red está siendo desarticulada en Alemania y Marruecos en operaciones desarrolladas entre julio y diciembre de 2006.