El terrorista de ETA Xabier Goldaraz Aldaya ha salido de la prisión zaragozana de Zuera a las 16.50 horas de este miércoles, en aplicación de la doctrina Parot. Unos 15 familiares y allegados le han esperado a las puertas del centro penitenciario desde esta mañana. Debería haber salido el 17 de septiembre de 2011 si no se hubiese aplicado la doctrina Parot.

Los familiares han llegado al centro penitenciario en dos furgonetas y varios turismos y han aguardado durante varias horas, desde la mañana, entrando y saliendo del control de accesos, debido al intenso frío y aire que sopla en este paraje de Zuera.

Tras almorzar y conversado entre ellos, a las 16.45 han entrado todos en el interior del recinto y han recibido a Goldaraz efusivamente, para después formar un cortejo a la salida de la prisión para ocultarle.

Iba ataviado con una sudadera blanca y roja y ha estado en todo momento tapado por sus allegados, que han exhibido una ikurriña, una bandera de Navarra y dos telas con el lema 'Euskal preso eta iheslariak etxera'. Le han introducido rápidamente en un vehículo y han abandonado inmediatamente el aparcamiento de la cárcel.

Goldaraz fue condenado en 1995 a 170 años de cárcel (junto a otros) como autor de un delito de terrorismo con resultado de atentado, a 29 años de reclusión mayor, y como autor de siete asesinatos frustrados, a 18 años de prisión mayor por cada uno de ellos, por la muerte del guardia civil Julio Gangoso Otero en 1988.

En 1993 le condenaron a 23 años de cárcel como autor de los delitos de militancia en banda terrorista y atentado en grado de conspiración, por la muerte del sargento de la Guardia Civil José Luis Hervás Mañas en 1990 (Goldaraz trasladó a otros etarras).

También está previsto que sea excarcelado en breve otro terrorista de ETA, José Ignacio Etxeberría Pascual, interno de la cárcel zaragozana de Daroca. Habría salido de prisión el 26 de marzo de 2010 si no se hubiese aplicado la doctrina Parot.

Fue condenado en 1994 a 55 años de prisión (junto a otros) como autor de un delito de atentado con resultado de muerte y tres delitos de asesinato frustrado, por la muerte del guardia civil Francisco Robles Fuentes en 1991.En 1995 le impusieron 30 años de cárcel como autor de un delito de asesinato con alevosía, por la muerte de Raúl Suárez Fernández en 1991.