Un autobús escolar que transportaba a 55 alumnos salió ardiendo este lunes en la localidad sevillana de Almadén de la Plata sin que finalmente hubiera que lamentar daños personales, según ha informado a Europa Press el alcalde de la localidad, José Luis Vidal.

En este sentido, ha destacado que el protocolo de actuación "funcionó a la perfección", lo que evitó "esta gran desgracia que hoy hubiera sido no sólo portada en los telediarios de nuestra nación sino de todas las portadas del mundo", pues estos 55 alumnos "estuvieron a punto de morir calcinados dentro del autobús".

Al hilo de ello, Vidal ha informado de que, una vez ocurrió el siniestro, se celebró una asamblea con los padres de los alumnos y los dueños de la empresa del autobús donde se explicaron las causas del accidente y se exigió por parte de los padres "autobuses con seguridad y perfectamente equipados".

El alcalde ha señalado que "uno de los grandes problemas" consiste en que los autobuses se mojan, lo que se debe a que los árboles que "invaden" la carretera "rompen casi todos los días los motores de calefacción ubicados en el techo del autobús", lo que hace que se abran grietas por donde entra el agua en el vehículo.

Según ha detallado, en la asamblea "se pusieron de manifiesto otros peligros" que afectan al traslado de niños, como por ejemplo el "lamentable" estado de "abandono" en que se encuentra la carretera Almadén de la Plata-Real de la Jara, mientras que la carretera Almadén-Cazalla "también se construyó en la dictadura de Primo de Rivera y desde los años 20 del siglo pasado permanece cortada".

Por todo ello, ha exigido a la Junta de Andalucía que actúe, ya que "después de más de 30 años de Gobierno las carreteras de Almadén están en el mismo estado que las dejaron las dictaduras de Primo de Rivera".