Asimismo, el padre de la víctima, en declaraciones a Europa Press, manifestó que estas acciones "derivaron en agresiones físicas y amenazas ante la negativa de la chica a acceder a sus pretensiones", al tiempo que añadió que en los últimos días, la situación era peor hasta que la hija decidió contarlo a sus padres.

Tras lo ocurrido, el progenitor decidió ponerse en contacto con la Asociación para los Derechos del niño y la niña Prodeni, que le recomendó la redacción de un escrito y su posterior envío al centro educativo para solicitar el alejamiento del presunto agresor.

Además, según indicó, si éste acudiera al instituto, la menor agredida no volverá al mismo.

Las agresiones, siempre dentro del instituto

De hecho, insistió en que la carta fue remitida al director del centro y a la Delegación provincial de Educación de la Junta de Andalucía, que se puso en contacto con el padre de la agredida hoy para ponerle en conocimiento de la asistencia al instituto de un inspector que se informará de lo sucedido.

Por otro lado, el padre de la alumna se quejó por la falta de conocimiento del centro y por el hecho de que la Dirección no se pusiera en contacto con el progenitor una vez conocidos los hechos.

Según Prodeni, en la denuncia se dice que el alumno habría realizado las agresiones en horas de recreo, a la entrada y a la salida de clase y siempre en el interior del instituto.

Así, los hechos denunciados describen maltrato físico, intimidación y tocamientos sexuales con pretensión de realizar el acto sexual, en dos ocasiones, el 25 y el 29 de enero.

Además, otras manifestaciones violentas habrían sido los intentos del supuesto agresor que derivaron en lesiones en la cara y una rodilla, cuando la alumna logró zafarse cayendo cuatro escalones y sufriendo una patada en la pierna.