Mineira de Corcoesto, la filial de la compañía canadiense Edgewater, prosigue "en conversaciones" con inversores para cumplir el requisito que le exige la Xunta de desembolsar un capital social por valor de 27 millones de euros.

Los contactos con inversores son "de todo tipo" y siguen su curso, según han informado a Europa Press fuentes de la empresa, después de que, a finales de julio de este año, la Xunta le comunicase este requisito para seguir adelante con el proyecto minero a cielo abierto en Cabana de Bergantiños (A Coruña), y pese al anuncio realizado hace medio mes por el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, en el debate del estado de la autonomía.

Edgewater entiende este fondo de capital social como "una garantía adicional" que le pide el Gobierno gallego para permitirle la explotación de oro en Corcoesto y asume este condicionante, pero, al respecto, recuerda que "cualquier proyecto minero" respalda con avales todas las actuaciones previstas.

De forma paralela, la firma se encuentra inmersa en el procedimiento administrativo, después de recibir la notificación —negativa— de la Xunta y dentro del plazo para presentar recurso, aseguran las fuentes consultadas. "Es el procedimiento habitual", precisan.

Así las cosas, la compañía se muestra confiada en alcanzar esos 27 millones de euros de capital social —por el cual los inversores se convertirían en accionistas— y, pese a ser una cantidad elevada, resalta que es el requisito "que queda" por cumplir, puesto que el tramite ambiental —la declaración de impacto— ya está "aprobada" y constituye una parte "sustancial", subraya la empresa.