El servicio de Salud Pública de la Consejería de Sanidad y Asuntos Sociales ha informado de que el agua de la red municipal de Hiendelaencina (Guadalajara) es apta para el consumo humano "ya que las últimas muestras recogidas han sido negativas por lo que los vecinos pueden utilizar el agua de la red municipal".

Según informa la Delegación de la Junta de Guadalajara en nota de prensa, el muestreo se ha realizado en el depósito municipal, en las instalaciones del Ayuntamiento, en la fuente de la Plaza Mayor y en varias viviendas que se encontraban habitadas, y por tanto han dejado correr el agua siguiendo las indicaciones oportunas.

Los resultados se han conocido a primera hora de esta misma tarde y se ha informado inmediatamente al Ayuntamiento, señala el Servicio de Salud Pública.

Además aclara que, ante las noticias aparecidas en los últimos días en los medios de comunicación y en base a lo dispuesto en el Real Decreto 140/2003, de 7 de febrero, por el que se establecen los criterios sanitarios de la calidad del agua de consumo humanos, el gestor del abastecimiento, que en este caso es el Ayuntamiento de Hiendelaencina, está obligado a elaborar y aplicar un plan de autocontrol.

Protocolo de autocontrol

En el mismo, añade, se deben incluir "todos" los aspectos relacionados con el control de la calidad del agua y de las instalaciones. El Servicio Periférico de Sanidad y Asuntos Sociales ha reclamado a este Ayuntamiento, hasta en cuatro ocasiones —la última en septiembre de 2013— este protocolo de autocontrol sin que hasta la fecha lo haya aportado, "aunque debería tenerlo disponible desde el 1 de enero de 2005".

Del mismo modo apunta que, según la normativa, cuando se altera la calidad del agua corresponde al gestor comunicar a la población las medidas correctoras y preventivas previstas para proteger la salud, mediante los medios y en la forma más adecuada, de acuerdo con la autoridad sanitaria, estando reglado que debe tomar las muestras necesarias para verificar la eficacia de las medidas adoptadas.

Por su parte, indica que a la administración sanitaria le corresponden, entre otras, las actividades de vigilancia sanitaria y tramitación de situaciones de incumplimientos o alertas en coordinación con los gestores.

Asimismo, indica que dadas las características de los municipios de la provincia de Guadalajara, es habitual que las actuaciones de vigilancia sanitaria de las aguas de consumo humano que realizan los servicios oficiales de Salud Pública, suplan a las obligaciones de autocontrol que corresponde realizar a los gestores.

Un hecho que, según añade, "es lo que puede provocar equívocos y que éstos piensen que toda la competencia en autocontrol recae en la administración sanitaria, exigiendo a ésta responsabilidades que corresponden a ellos mismos".

Al tanto desde el inicio

También aclara que desde el inicio, el servicio oficial de Salud Pública ha estado al tanto del vertido accidental de gasóleo y, en consecuencia, ha transmitido al alcalde las actuaciones de primer nivel necesarias para evitar cualquier riesgo a la población derivado del consumo del agua contaminada.

Siguiendo el protocolo sanitario establecido, el servicio de Salud Pública dice que comunicó al Ayuntamiento de Hiendelaencina la obligación de adoptar medidas correctoras y preventivas inmediatas, como la suspensión del suministro de agua, y en dar la información correspondiente a la población.

"La eficacia de las medidas adoptadas se basa en la investigación de presencia de hidrocarburos en la red, a través de muestreos de diferentes puntos de la misma, y el posterior seguimiento de los resultados hasta que se dictamine la aptitud de agua para el consumo humano", añade.

También afirma que a pesar de que el mencionado Real Decreto 140/2003 establece que corresponde a los gestores realizar los controles necesarios, "tanto la toma de muestras como las analíticas, están siendo asumidas por el Servicio Periférico de Sanidad y Asuntos Sociales".

Finalmente, Salud Pública recuerda que todos los ayuntamientos pueden dirigirse a los servicios oficiales de Salud Pública para atender cualquier consulta sanitaria que se les pudiera plantear