El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha reconocido que se debe "apoyo, reconocimiento y reparación a las víctimas" de la "violencia sin sentido" de ETA. Además, ha asegurado que corresponde a los poderes públicos "allanar el camino" para "dejar atrás actitudes de un pasado" que hay que superar.

Durante su discurso en el acto de apertura del año judicial, que se ha celebrado en Palacio de Justicia de Bilbao, Urkullu ha querido hacer "una referencia al compromiso ético" con que el que su Gobierno "afronta la consolidación de la paz y la convivencia en Euskadi".

Tras recordar que "hace dos años ETA anunció el cese definitivo de su acción terrorista", ha señalado que "este auditorio muy especialmente —en alusión a jueces y fiscales— es consciente de que muchas personas han padecido mucho durante muchos años".

"Debemos apoyo, reconocimiento y reparación a las víctimas de esta violencia sin sentido. Nuestro compromiso ético está con las personas. Vivimos un nuevo tiempo, tenemos una oportunidad histórica, genuina", ha añadido.

Asimismo, ha subrayado que es a los poderes públicos a los que corresponde "allanar el camino, contribuir a superar las dificultades, facilitar las decisiones que dejen atrás actitudes y comportamientos de un pasado que queremos y debemos superar".

Acuerdos entre diferentes

El lehendakari ha destacado su "compromiso político" para construir una sociedad más justa "de forma compartida" y ha recordado que "la política de la mano tendida y del acuerdo entre diferentes, comienza a hacerse realidad".

"Es lo que Euskadi nos demanda y necesita: un cambio de actitud. Aristóteles decía que somos lo que hacemos: nos volvemos justos realizando actos de justicia, templados realizando actos de templanza", ha añadido.

En este sentido, ha asegurado que no cejará "en el empeño de extender una actitud propiciatoria de la cultura del acuerdo, la colaboración y el pacto entre diferentes". "El objetivo no es otro que aunar voluntades para lograr una Euskadi más justa y cohesionada", ha aseverado.