El líder del partido neonazi griego Amanecer Dorado, el exmilitar Nikolaos Mijaloliakos, y otros altos cargos de la formación fueron detenidos este sábado por la policía en conexión con la muerte del cantante hip hop y activista Pavlos Fyssas, asesinado la semana pasada.

Entre los arrestados también está el portavoz del partido en el Parlamento, Ilyas Kasidiaris, y el secretario de la organización local del barrio de Nikea, a la que pertenecía Yorgos Rupakias, el asesino confeso de Fyssas.

En total, la Fiscalía ha emitido 38 órdenes de arresto contra la cúpula de Amanecer Dorado, de las que por el momento se han ejecutado 10.

Las órdenes contra los dirigentes de Amanecer Dorado, muchos de los cuales son diputados, han podido ser emitidas porque la Cámara ha aceptado levantarles la inmunidad para permitir la investigación que ha seguido al asesinato de Fyssas.

Con todo, los diputados detenidos conservan sus derechos como parlamentarios hasta que no haya una decisión judicial en su contra. Se trata de la primera ocasión desde la caída de la dictadura (1967-1974) en que miembros del Parlamento son detenidos en Grecia.

Por su parte, el Gobierno griego se puso en contacto con los representantes de la troika, cuyos representantes se hallan en Atenas en misión de evaluación, para asegurarles que la detención de la cúpula de Amanecer Dorado no pondrá en peligro las reformas, ni desestabilizará el país.

"No existe peligro (de desestabilización política)", afirmó el ministro griego de Finanzas, Yannis Sturnaras, tras una reunión de urgencia con el primer ministro, Andonis Samarás. "De hecho, el primer ministro ha informado (a la troika) sobre estos hechos", explicó el titular económico del Gobierno de Atenas.

Además, repitió que no hay peligro de que se deban convocar elecciones generales anticipadas aunque el grupo parlamentario de Amanecer Dorado dimita en bloque y provoque un vacío en ciertas circunscripciones. La misma idea repitió el ministro portavoz del Gobierno griego, Simos Kedikoglu en declaraciones al canal de televisión Mega ante los crecientes rumores de que los parlamentarios neonazis podrían renunciar a sus actas de diputado.

La legislación griega prevé que en caso de renuncia de un diputado, el siguiente en la lista electoral sea elegido automáticamente, aunque si también los sustitutos renuncian al cargo, deberían convocarse elecciones para la renovación de los escaños vacantes en sus respectivas circunscripciones.

Amanecer Dorado logró el 6,9% de los votos en las pasadas elecciones, lo que le valió 18 escaños en el Parlamento, prácticamente todas ellos procedentes circunscripciones muy pobladas como Atenas, Salónica o El Pireo. Esto implicaría que buena parte del país debería participar en unas nuevas elecciones, aunque sólo para elegir 18 diputados de los 300 con que cuenta el hemiciclo.

Kedikoglu explicó que, en caso de dimisión de los diputados neonazis, se iniciarán "los procedimientos previstos en la Constitución y la ley electoral" y negó que eso vaya a suponer la convocatoria de elecciones anticipadas, ya que sólo se llevaría a cabo una elección parcial.

El diputado Artemios Matzeópulos, escoltado por otros diputados de la organización, afirmó que estas detenciones son prueba del "pánico" de un "sistema político corrupto" que teme la influencia de la organización fascista. "Las ideas no pueden ser encarceladas, seguiremos luchando por ellas y no daremos marcha atrás", añadió Matzeópulos.

En el exterior de la Dirección General de Policía, adonde han sido trasladados los detenidos, se ha congregado un grupo de entre 200 y 300 militantes y simpatizantes de Amanecer Dorado exigiendo la liberación de sus líderes.

La oposición izquierdista por su parte ha reaccionado con satisfacción a las detenciones de los dirigentes de Amanecer Dorado. "Syriza exigía desde hace tiempo la detención de los responsables de actos criminales. Ahora, debemos llevarlos a juicio. La manera en que se lleve el asunto de Amanecer Dorado será una prueba de calidad de nuestra democracia", afirmó el diputado de la coalición de la izquierda Syriza, Panos Skurletis.

Por su parte, la Comisión Europea ha emitido un comunicado en el que asegura que "sigue con atención" el desarrollo de los acontecimientos en Grecia y mostró su "total confianza" en que la Justicia helena "tomará las medidas necesarias".