La concejal socialista del Ayuntamiento de Burgos, Carmen Hernando, ha pedido este martes al equipo de Gobierno local que retorne su política fiscal a niveles de 2011, tras el registro de las alegaciones que su agrupación ha presentado a las Ordenanzas Fiscales Municipales de 2014.

"No estamos de acuerdo con la política fiscal del Ayuntamiento de Burgos de los últimos diez años", ha aseverado Hernando en declaraciones recogidas por Europa Press, antes de añadir que es "necesario" que se vuelva, como mínimo, a los niveles impositivos del principio de legislatura.

En este sentido, ha calificado de "injustas" las subidas previstas en algunos impuestos y precios públicos y ha asegurado que algunos de esos incrementos "perjudicarán" al desarrollo de la economía local.

Por un lado, ha lamentado el incremento del 4,5 por ciento en el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI), a la vez que ha recordado que este impuesto se ha incrementado un 20 por ciento en los últimos dos años y hasta un 120 por ciento en la última década.

Además, ha asegurado que los cambios planificados para abonar el IBI el próximo año conllevan aparejados la eliminación de algunas bonificaciones, por lo que el incremento final del impuesto podría alcanzar el siete por ciento.

Por otro lado, ha explicado que el Grupo Municipal Socialista ha presentado también alegaciones a la Ordenanza Fiscal General, al considerar que el fraccionamiento de pago previsto para el próximo ejercicio, para cuya implantación el PSOE ha solicitado un informe municipal, es "injusto" al poderse aplicar únicamente a cuantías anuales superiores a 300 euros.

La Agrupación Municipal Socialista, además, ha presentado alegaciones a algunos precios públicos del Área de Servicio Sociales, como los relativos a las escuelas infantiles municipales, y al servicio de aguas, en el que han pedido que se elimine el aumento del seis por ciento en la tasa y la supresión del canon de 4,5 millones de euros que el ayuntamiento cobra cada ejercicio a la Sociedad Municipal Aguas de Burgos.