El PP vasco ha aceptado la oferta del Sindicato Unificado de Policía (SUP) por la que completará con sus afiliados sus listas electorales, debido a la falta de candidatos a consecuencia del miedo que ha generado ETA tras la ruptura de la tregua.

María San Gil, presidenta del PP vasco, ha aceptado la iniciativa que José Manuel Sánchez Fornet, secretario general del SUP, le hizo por carta el pasado 27 de diciembre no sólo por las amenazas de ETA y su entorno, sino por la ley de Igualdad, que se tramita en las Cortes (el PP ha anunciado que se abstendrá) y que obligará a los partidos a fijar cuotas obligatorias de mujeres en sus listas, según informa ABC.

El sindicato recuerda la incompatibilidad de los policías para ocupar cargos públicos y por ello subraya que ocuparían "puestos donde no podamos ser elegidos, por razones obvias de nuestra profesión". Indica a continuación que la iniciativa surgió durante una conversación sobre el "distinto apoyo que reciben las Fuerzas de Seguridad de los responsables políticos vascos".