Atropellados, heridos de bala, envenenados, electrocutados y víctimas de trampas ilegales... Así encontró el Equipo de Rescate y Fauna Salvaje Protegida de la Comunidad de Madrid a unos 4.000 animales silvestres.

El culpable, en un 98% de los casos: el hombre. Buena parte de estos animales pertenece a especies amenazadas o en peligro de extinción, como por ejemplo las aves rapaces.

Tras el rescate, el equipo de urgencias especializado en fauna salvaje envía a los animales a  centros con los que la Comunidad ha establecido convenios para que reciban los cuidados necesarios y puedan volver a su hábitat. Entre las víctimas hubo aves, reptiles, mamíferos, peces y anfibios.

Teléfono de aviso

El Seprona de la Guardia Civil, la Policía Municipal, las asociaciones de ecologistas y los cazadores son las principales fuentes de captación de animales silvestres heridos.

La Comunidad ha habilitado también el número 902 101 245 para que cualquier persona pueda informar si encuentra un animal salvaje o protegido dañado.

Tras recibir el aviso, el equipo de rescate se pone en contacto con el emisor y luego traslada una unidad móvil a la zona, donde lo atiende un veterinario.

Si es necesario, el ejemplar es enviado a un hospital de fauna y luego a una unidad de rehabilitación, donde tratarán de devolverlo cuanto antes a su espacio vital.