El conselleiro maior del Consello de Contas, Luciano Fariña, ha señalado que el informe de este ente fiscalizador referido a los datos del ejercicio de 2010 ha detectado "desplazamientos de gasto" en la Xunta de ese año al siguiente, pero en el documento "no se dice que sean caprichosos".

En declaraciones a los medios tras entregar este jueves a la presidenta del Parlamento de Galicia, Pilar Rojo, la memoria de las actividades desarrolladas en 2012 y los informes realizados por Contas —que analizan, entre otras áreas, el Sergas, los fondos europeos o las elecciones autonómicas de 2012—, Fariña ha recordado que, cuando se conoció un avance del informe, se apuntó a un desplazamiento de 400 millones de euros, una cifra que "no es exacta".

El desplazamiento de gasto, ha explicado, permite tener "un resultado más favorable", pero ha pedido "analizarlo con cierto cuidado" porque "la administración pública tiene un periodo de tiempo para reconocer las obligaciones" y es necesario revisar si ese reconocimiento se ha realizado "dentro del periodo" en el que se tiene que hacer.

Además, ha asegurado que estos traslados de gasto aparecen en ejercicios anteriores: "estas cosas, normalmente, vienen de atrás". "Si este fuese el primer ejercicio —en alusión al desplazamiento desde 2010—, el efecto sería brutal", ha destacado y ha incidido en que una comparación con informes de años anteriores revela que esta práctica "está también" en esos años.

"El hecho de que una obligación esté reconocida en el ejercicio siguiente no debe ser obstáculo porque está autorizado —el gestor— para ello", ha añadido, aunque ha precisado que "otra cosa es cuando las obligaciones se desplazan de forma caprichosa". "Eso me parece que no está dicho en el informe; en el informe lo que está dicho es que aparecen desplazamientos de gasto, pero no se dice que sean caprichosos", ha señalado.

El efecto,

En el ejercicio inicial

Asimismo, ha expuesto que cuando se da un desplazamiento de gasto "el verdadero efecto se produce en el ejercicio inicial" y, al irse trasladando posteriormente de uno a otro, termina por ser "completamente neutro". "Un posible defecto será en el primero, pero no en los siguientes", ha incidido y ha pedido tener en cuenta en el análisis la legislación vigente.

En este sentido ha puesto como ejemplo el caso de la recepción de obras, en las que la administración, antes de reconocer la obligación y expedir la certificación debe verificar que la infraestructura es efectivamente la que había contratado. "Para verificar la realidad tengo un periodo de tiempo determinado. Si es de dos meses y lo tengo hecho en el mes de septiembre, debo reconocerlo en el año, si se me entrega el 15 de diciembre, es lógico que lo haga en el ejercicio siguiente", ha justificado.

Así, ha pedido poner "exquisito cuidado" en el análisis y, en el caso concreto de los gastos desplazados en 2010, ha aludido a "ciertos aspectos relativos al ámbito de la salud", en el que la necesidad de suministros es "muy dinámica y compleja" y "a veces hay que improvisar".

Contabilidad analítica en el sergas

Sobre las recomendaciones que el Consello de Contas hace al Servizo Galego de Saúde, Luciano Fariña ha destacado que "siempre se insiste en la necesidad de llevar una contabilidad analítica, que es fundamental para los análisis de costes". En este punto ha distinguido entre el funcionamiento sanitario, que considera "bastante ágil" y la información de la gestión presupuestaria, que su es "más precisa" puede aportar "elementos de juicio que permitan mejorar la gestión".

El conselleiro maior ha apostado también por hacer comprender a "todo el mundo" el coste de la sanidad, que "es muy elevado", no solo por el capítulo de personal, sino por los de tratamiento. "Insinuamos en el informe que debe llevarse un tipo de contabilidad no solo de ejecución presupuestaria, sino también financiera y analítica", ha insistido.

"Nosotros demandamos al gestor que resuelva los problemas y muchas veces el gestor no tiene la respuesta inmediata y exacta y el respeto a la legalidad le supone cierta cautela", ha añadido y ha pedido que esas "precauciones y cautelas sean superadas".

A modo de ejemplo, se ha referido a las provisiones que un hospital tiene de un medicamento y al análisis de que ese 'stock' puede tener un efecto financiero negativo. "El gestor sanitario es más sanitario que económico-financiero", ha señalado y ha considerado que se "producen distorsiones que es necesario superar".