'Curiosidad', cómo el placer de saber borra las fronteras entre arte, ciencia y fantasía

  • Un libro documenta cómo el deseo por conocer y la atracción por lo poco habitual unieron arte y ciencia a lo largo de los siglos.
  • La guía de rarezas y proyectos reúne historias dispares, desde la del rinoceronte de Durero a un proyecto sobre el monstruo del Lago Ness.
  • La publicación acompaña a una exposición itinerante sobre la curiosidad.
La serie 'Specola Vaticana' reúne fotos de papas y obispos mirando por el telescopio del Observatorio del Vaticano
La serie 'Specola Vaticana' reúne fotos de papas y obispos mirando por el telescopio del Observatorio del Vaticano
Laurent Grasso - Courtesy Michel Serrano and Gian Carlo Parodi, MNHN
La serie 'Specola Vaticana' reúne fotos de papas y obispos mirando por el telescopio del Observatorio del Vaticano

Alberto Durero realizó en 1515 un asombroso grabado de un rinoceronte indio basándose en descripciones ya que nunca llegó a ver uno de verdad. Frances Glessner Lee fue la primera mujer en entrar en la Academia Estadounidense de Ciencias forenses: en los años cuarenta, completó una serie de 20 dioramas que reproducían muertes inexplicables, con réplicas de cadáveres en miniatura en situaciones basadas en casos reales que servían para formar a nuevos detectives. Cuando un taxidermista de Londres recibió en 1870 la piel de una morsa de Canadá para exponerla en un museo, no sabía qué aspecto tenía el animal vivo y lo rellenó hasta que la piel quedó tersa, sin un pliego.

El deseo de innovar y la atracción por lo poco habitual —producto del impulso por explorar, analizar y compartir información— son el germen del libro Curiosity: Art and the Pleasure of Knowing (Curiosidad: el arte y el placer de saber), una publicación que acompaña a la exposición itinerante del mismo nombre, ahora hasta el 15 de septiembre en el museo Turner Contemporary de Margate (Inglaterra).

Alrededor de la idea del gabinete de curiosidades como acicate para la investigación y la ampliación de conocimientos, el libro (publicado por la editorial inglesa Hayward Publishing) se concentra en la fascinación por descubrir —que dominó el siglo XVII— con una colección de textos, grabados e imágenes de varios siglos. El tomo demuestra cómo el ejercicio intelectual y estético de los pensadores ha unido siempre el arte y la ciencia, lo moderno y lo antiguo, la realidad y la ficción.

Fascinaciones pasadas y presentes

De lo antropológico a lo oculto, la ecléctica selección (hecha por el escritor y crítico británico Brian Dillon y la novelista e historiadora británica Marina Wagner) hace un repaso por historias como la de la morsa disecada del Museo Horniman de Londres o la protagonizada por los alemanes Leopold Blaschka y su hijo Rudolf, artesanos del vidrio y autores a mediados del siglo XIX de varias colecciones de criaturas marinas como anémonas y medusas de cristal que se expusieron en los mejores museos de Europa.

El compendio también incluye trabajos de artistas y colectivos contemporáneos. El irlandés Gerard Byrne analiza en un proyecto entre divulgativo y artístico cómo la leyenda del monstruo del Lago Ness, surgida en los años treinta del siglo XX, se fundamentó en la imagen. La organización estadounidense The Center for Land Use Interpretation (CLUI), en Los Ángeles, investiga la relación del ser humano con la superficie terrestre y desde 1994 se ha hecho con un extenso archivo de imágenes, datos y materiales empleado para interpretar la huella de la humanidad en el paisaje.

Curiosity: Art and the Pleasure of Knowing pone en conjunto fascinaciones pasadas y presentes que eliminan las fronteras entre ciencia, arte y fantasía para crear una guía que despierte la curiosidad de quienes se interesan por la astronomía, el mundo animal, las maravillas de la naturaleza, los mapas y la obsesión humana por coleccionar.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento