La crisis está rompiendo la igualdad de oportunidades en materia de educación en favor de las familias con mayor poder adquisitivo.
Un claro ejemplo de ello es que unos 600 alumnos de la Universitat Politècnica de València (UPV) no han podido pagar todavía sus matrículas del curso pasado por la situación y por la subida de las tasas.
Esta cifra supone un 1,6% de los 32.371 alumnos que tiene la UPV, incluyendo grados y másteres, y es similar a la del curso pasado, según han informado a 20 minutos fuentes de la institución.
Además, han añadido que la cifra de estudiantes morosos casi podría duplicarse, ya que hay aproximadamente 500 alumnos cuya deuda aún no está vencida (todavía no se consideran impagados).
A estos podrían sumarse otros 500 alumnos que están esperando la resolución de la beca de la Generaitat (por tanton aún no son deudores) para poder satisfacer su deuda. De esta forma, en el peor de los casos, la morosidad podría elevarse a 1.600 alumnos, es decir, el 7% de su alumnado.
Desde la UPV han asegurado que tratarán de buscar soluciones y fórmulas de pago caso por caso para evitar que estos alumnos tengan que dejar los estudios por motivos económicos.
Opacidad en la Universitat de València
Una de las consecuencias de delicada situación financiera de las arcas públicas fue el incremento de las tasas universitarias para el curso 2012/2013 que acaba de finalizar. La subida aprobada fue del 33% para los créditos de primera matrícula.
Así, por ejemplo, para los estudiantes de Medicina (experimentalidad 5) la primera matrícula pasó de 1.139 a 1.478 euros y para los de Arquitectura (experimentalidad 4) el incremento fue de 354 euros, al pasar de 1.063 euros a 1.416.
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