Sin embargo, desde la Federación de Vecinos recuerdan que «Vigo no puede permitir que las grandes promesas de la ciudad sigan paradas otro año». Entre las carencias de la ciudad destacan la falta de albergue municipal y de un planeamiento urbanístico que permita ampliar el aeropuerto.

En 2007, el Concello promete humanizar el contorno de Balaídos, As Travesas, Lavadores, Coia y Espedrigada. También se mejora el alumbrado en las parroquias y se realizará la tercera fase de las obras de Travesía. Sin embargo, el césped de Balaídos se llevará más dinero (220.000 euros) que la eliminación de barreras arquitectónicas (200.000 euros).