China planea la construcción de un túnel submarino de 123 kilómetros que conectará las ciudades costeras de Dalian, en la provincia nororiental de Liaoning, con Yantai, en Shandong (este del país), y que será el más largo del mundo.

El proyecto, que se planteó por primera vez hace dos décadas, se presentará próximamente al Consejo de Estado chino (órgano Ejecutivo) para que le dé su aprobación definitiva, según informó el rotativo Times Weekly.

El pasaje incluirá una línea de tren de alta velocidad −los convoyes podrán viajar hasta los 220 kilómetros por hora− y carreteras para viajar en ambos sentidos.

Según Wang Mengshu, de la Academia china de Ingeniería −el organismo que presentará el proyecto al Gobierno− el viaje entre las dos ciudades costeras a través del estrecho de Bohai se cubrirá en 40 minutos, mientras que ahora los desplazamientos en barco tardan entre seis y ocho horas.

El coste estimado de la infraestructura será de 260.000 millones de yuanes (42.340 millones de dólares, 32.360 millones de euros) que desembolsarán los Gobiernos provinciales de Shandong y Liaoning y la compañía estatal de ferrocarriles China Railway.

Según Wang, este coste podría amortizarse 12 años después de la finalización del proyecto gracias al transporte de mercancías, los ingresos fiscales, el aumento del turismo o la eficiencia en el uso del combustible.

El proyecto lo propuso por primera vez en 1992 un oficial de la localidad de Yantai con el objetivo de mejorar los contactos entre ambas ciudades e impulsar la economía y el Gobierno central ordenó un estudio de viabilidad un año después.