Los vecinos de Villaverde, que han celebrado por todo lo alto la prolongación de la Línea 3 hacia el sur, lo que supondrá la llegada del Metro a sus barrios, temen ahora que el suburbano funcione a medio gas en su distrito.

Varias asociaciones vecinales denunciaron ayer que la Comunidad planea dividir la línea en dos tramos, con conexión en la nueva estación de Almendrales.

Los vecinos aseguran que la Consejería de Transportes les comunicó, en una reunión celebrada el pasado 19 de diciembre, que los trenes recorrerían el trazado actual (Moncloa-Legazpi) con frecuencias en hora punta de dos o tres minutos entre tren y tren mientras que, por Villaverde, desde Almendrales, lo haría cada cuatro o seis minutos.

Además, las asociaciones denuncian que la Consejería tiene previsto obligar a los viajeros de uno de cada dos convoyes a hacer transbordo en Almendrales.

"Sólo en casos de emergencia"

Fuentes de Transportes explicaron ayer que la Línea 3 se dividirá en dos tramos a la altura de Almendrales para que, "sólo en casos de emergencia", como averías, sea posible mantener abierto parte del trazado y no haya que suspender toda la línea, como ocurre ahora en la Línea 10.

La Comunidad dice, no obstante, que en condiciones normales la frecuencia de paso será la misma.