Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea (UE) comenzaron este viernes la segunda jornada de su cumbre en Bruselas, centrados en la coordinación de sus políticas económicas, en especial en la unión bancaria y la decisión de abrir las negociaciones para la adhesión de Serbia al bloque.

Los Estados miembros concluyeron la sesión del jueves en la madrugada y satisfechos por el impulso político obtenido con el acuerdo sobre presupuesto para reactivar el crecimiento económico y la creación de empleo.

El debate de este viernes tiene lugar después de que los Veintisiete hayan llegado a acuerdos significativos sobre la recapitalización directa de los bancos, las reglas para los futuros rescates, y la puesta en marcha de un supervisor bancario único.

La UE, aunque ha logrado avances, tiene por delante también desarrollar los contratos por los que los países podrán acceder a fondos a cambio de reformas y llevar a cabo las nuevas pruebas de resistencia de la banca y el análisis de sus activos.

Confirmará, por otro lado, la apertura de negociaciones para la adhesión de Serbia, en reconocimiento del histórico acuerdo logrado por Belgrado para normalizar sus relaciones con Kosovo, su exprovincia cuya independencia sigue sin reconocer.

La UE prevé abrir el proceso negociador "como muy tarde" en enero de 2014, según el borrador de conclusiones de la cumbre, que prevé que en los próximos meses el Consejo apruebe el mandato de negociación que le planteará la CE.

Los líderes discutirán también la entrada de Letonia en la zona euro en enero del próximo año, un paso que ya cuenta con el visto bueno del Banco Central Europeo (BCE) y de la Comisión Europea (CE).

El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, participa en la sesión final del Consejo Europeo de Bruselas este viernes satisfecho por lo logrado en la cumbre del jueves, ya que la delegación española considera que se han acordado sus demandas en materia de empleo juvenil y financiación de las pymes.

Respecto al primero de ellos, destacan que se ha conseguido que el fondo de 6.000 millones de euros previsto en el próximo presupuesto comunitario hasta 2020 se puedan gastar en los dos primeros años, lo que va a suponer que entre 2014 y 2015 España va a recibir 1.900 millones.

Además de considerar que se han dado también pasos notables para aumentar los recursos destinados a las pequeñas y medianas empresas, el Gobierno destaca que de la cumbre de Bruselas va a salir igualmente un mensaje claro de que la unión bancaria no se detiene y va a seguir su camino con más impulso.

En ese contexto, el Gobierno español concede también gran importancia a la cumbre sobre empleo juvenil que se celebrará el próximo 3 de julio en Berlín organizada por la canciller, Angela Merkel, y a la que asistirán, junto a los ministros de Trabajo de los socios comunitarios, Rajoy y Hollande.