Alba L.C, la primera mujer del mundo a la que se practicó un transplante bilateral de antebrazos y manos y que el martes recibió el alta en el Hospital Universitario La Fe de Valencia, aseguró a la salida del centro médico que "por ahora voy a dedicarme al cien por cien a mi recuperación" y expresó su "felicidad por la "evolución tan rápida" que está experimentando.

A su salida del hospital manifestó a los medios de comunicación que se encuentra "muy bien" y subrayó que "la recuperación es enormemente satisfactoria y estoy muy feliz de ver como va la evolución de rápido".

Alba L.C. abandonó el martes La Fe junto al conseller de Sanidad, Rafael Blasco, quien acompañó a Alba hasta su nueva residencia en Valencia. La paciente permanecerá unos meses en la ciudad del Túria para continuar la rehabilitación y su control post-operatorio.

Blasco calificó de "espectacular" este alta médica y destacó que Alba "ha demostrado tener una voluntad de hierro". Añadió que "es una inmensa alegría que pueda irse a su nueva casa para hacer una vida normal"