La Fiscalía ha solicitado la expulsión del país por periodo de diez años para un hombre, de iniciales S.O., de nacionalidad rusa y en situación administrativa irregular en España, por presuntamente verter alcohol etílico sobre una mujer con la que iba a compartir una comida con amigos y después prenderle fuego, en Motril (Granada).

Le atribuye inicialmente un delito de homicidio en grado de tentativa, y una falta de hurto, pues aprovechó el momento para robarle el teléfono móvil a su víctima, por los que el fiscal considera que debería hacer frente a una pena de cinco años de prisión, si bien, teniendo en cuenta su situación legal, entiende que esa condena debería ser sustituida por su expulsión.

Según consta en el escrito de acusación provisional del Ministerio Público, al que ha tenido acceso Europa Press, los hechos se remontan al 26 de marzo de 2012, cuando la mujer se encontraba en un descampado urbano conocido como la Rambla del Piojo, en Motril (Granada), en compañía de varios amigos, entre ellos el procesado, de nacionalidad rusa y en situación administrativa irregular en España.

Cuando la mujer se encontraba haciendo la comida en una hoguera realizada a tal efecto, fue increpada para que se diera prisa en acabarla por el acusado, que se marchó acto seguido para regresar a los pocos minutos, y, "con el ánimo de acabar" con su vida, vertió sobre ella una botella de alcohol etílico por la espalda, prendiéndole fuego con un mechero.

Mientras que la mujer se quemaba ardiéndole las ropas, el inculpado, "con ánimo de enriquecimiento sobrevenido", le sustrajo el móvil que portaba, mientras que, exhibiendo en sus manos grandes bolsas de basura y un cuchillo jamonero, le amenazaba riéndose con las palabras "Te voy a descuartizar y te voy a tirar al mar poco a poco".

Gracias a la intervención de los demás amigos de la víctima, se pudo rápidamente sofocar el fuego de sus ropas, sin que el procesado lograra su "propósito". No obstante, la mujer resultó con quemaduras de primer y segundo grado, por las que precisó 30 días de curación, diez de ellos impeditivos. Posteriormente, y por causas ajenas a esta agresión, falleció el 9 de febrero de 2013.