La abuela y el tío maternos de Ruth y José, los dos niños desaparecidos en Córdoba en 2011, han relatado en el juicio por asesinato contra José Bretón que el acusado era "estricto" y "controlador" con sus hijos. La primera, Obdulia Ramos, se ha referido a sus nietos como "mis niños" y su intervencion ha sido muy emotiva, tanto que algún miembro del jurado ha derramado alguna lágrima.

La madre de Ruth Ortiz ha relatado a la fiscal que su relación con el procesado era "cordial y normal", aunque "se deterioró" cuando el matrimonio se fue a Huelva a vivir. Ha asegurado que Bretón era "una persona fría", "rencorosa" y que "no perdía de vista ni una vez" a sus hijos, pero que no animó a su hija a que se separara a pesar de constatar su deterioro, "era un zombi andando", ha añadido.

Ha relatado que Bretón le dijo una vez que "jamás" pisaría su casa y que cuando se fueron de Huelva a El Portil, no vio a los dos niños "en tres meses". En relación al día en el que se fueron sus hijos de Huelva a Córdoba, la abuela ha destacado que, cuando se iban, Bretón le dijo que era "la última vez" que los veía". A Bretón, ha dicho Ramos, "le molestaba" que la niña le hiciera "cariños" a la abuela.

Y también le molestaba que el niño "cuando salía de la guardería" se fuera para ella, ha relatado; "Lo vi maltratar al niño, sentarlo como un barreño en el asiento del coche", ha destacado, para precisar que Bretón tenía "manías" como "utilizar pañuelos para abrir las puertas", entre otras.

También ha declarado el hermano de Ruth Ortiz, Estanislao Ortiz, que ha explicado que la relación de José y Ruth "al principio fue normal, aunque un poco fría desde mi punto de vista, pero lo achacaba a que en nuestra familia siempre hemos sido muy cariñosos y besucones". No obstante, agrega, "con el paso del tiempo te vas dando cuenta de que en situaciones le gritaba, le llamaba la atención por hechos que yo no lo concebía".

"La sensación siempre era que el padre me observaba al jugar con la niña", ha comentado Estanislao, para precisar que la situación "iba a acabar muy mal" y dice que vio otras situaciones "con miradas que no entendía" y en una ocasión apartó a Ruth en una habitación y "le pegó voces, porque habían tocado a la niña".

Los amigos de la familia comenzaron a declarar pasadas las 13,30 horas. Uno de ellos, agente policial, ha comentado que "nunca" vio "nada extraño" en la relación, aunque Bretón era "un poco estricto" y dice que lo vio "un poco alterado" con la separación.

Otra amiga de la familia ha declarado que Bretón le llamó para que hablara con Ruth para "ver si se podía reconciliar" el matrimonio, y en una ocasión lo notó "más nervioso" y relata que "no imaginaba que pudiera hacer daño a los niños", aunque le aseguró que "quería quedarse con los niños como fuera, que estaban mejor en Córdoba que en Huelva, pero el extremo al que ha llegado no lo esperaba".

Uno de los amigos ha manifestado que notó a Bretón "muy dolido" con la separación, aunque tras supuestamente desaparecer los niños dice que habló con él y "más que triste" percibió que "estaba como furioso". Otro ha aseverado que Bretón es una persona autoritaria, que "todo lo controlaba", y dice que le extraña que él se despistara de los niños "en algún momento", puesto que estaba "muy encima" de ellos.

Mientras, el marido de la mujer que declaró en el juicio de la bofetada de Bretón a su hijo ha expresado que el acusado tenía un trato "normal y cariñoso" con los niños, aunque días antes de los hechos se refería a Ruth Ortiz como "una hija de puta por lo que le había hecho" y que "no se iba a salir con la suya", de modo que "hacia hincapié en que iba a hacer lo posible por quedarse con los niños", ha apostillado el amigo de Bretón, a quien considera una persona "machista".

La mujer ha señalado que Bretón le pidió que mediara en la separación de ellos, pero "era algo demasiado personal" y ella dijo que se preocuparía por el estado de Ruth como amiga, pero no más, a lo que añade que "notaba que era una pareja en la que él siempre actuaba de manera machista" y en las últimas ocasiones "con maltrato psicológico por los malos modos en los que le hablaba".