Caja Rural Castilla-La Mancha ha entregado en el vestíbulo de los Servicios Centrales de la entidad financiera 2.000 kilos de víveres a Banco de Alimentos de Toledo, con motivo de la campaña solidaria emprendida por la Fundación y el Departamento de RSC de la Entidad durante la celebración de la "IX Edición del Desafío 2013", que tuvo lugar la semana del 20 al 25 de mayo en la finca municipal Dehesa Boyal de Los Yébenes (Toledo).

El director general de la cooperativa de crédito, Víctor Manuel Martín López, ha realizado la entrega de dicha remesa al presidente de Banco de Alimentos de Toledo, Manuel Lanza Alandi, en presencia de la directora de la Fundación Caja Rural Castilla-La Mancha, Paloma García-Tizón Larroca; la directora de la División de Recursos Humanos de la entidad financiera, Paloma Gómez Díaz; y la secretaria de Banco de Alimentos, Julia Pérez Sánchez.

Martín López ha indicado que "esta es una pequeña contribución que realizan los cerca de 800 empleados que tiene la Entidad, quienes han aportado más de 2,5 kilos de alimentos en estos momentos de dificultad, echando una mano a quienes más lo necesitan", ha informado la entidad en nota de prensa.

Además, ha valorado esta iniciativa como certificadora "del fomento del espíritu solidario y los valores de responsabilidad social corporativa que propugna una Entidad de economía social como la nuestra".

Martín López, por último, ha resaltado la labor "fundamental" que realiza Banco de Alimentos en la provincia "al hacer llegar los alimentos a organizadores que hacen un buen uso de ello y que lo distribuyen de forma equitativa y justa a aquellos que lo necesitan".

Lanza Alandi, por su parte, ha agradecido el apoyo y solidaridad de Caja Rural Castilla-La Mancha hacia las personas más desfavorecidas. "Deseo dar las gracias de todo corazón y con mayúsculas, y también garantizar que estos alimentos llegarán a las personas que verdaderamente lo están necesitando", ha señalado.

Además, ha resaltado que sólo en 2012 Banco de Alimentos repartió 267.000 kilos de víveres, una media de más de 1.000 kilos diarios a las entidades con las que colabora.

Procedencia de las donaciones

Las donaciones fueron efectuadas por los propios empleados de la Entidad, movilizados por el Departamento de RSC y la Fundación Caja Rural Castilla-La Mancha, en un ejercicio de responsabilidad corporativa, sensibilidad y solidaridad con las personas más necesitadas.

Los alimentos entregados son productos básicos no perecederos como pasta, legumbres, azúcar, cacao, café o conservas, con el objetivo de que las familias puedan hacer frente a sus principales carestías sin que estos productos caduquen o se deterioren.

A través de estas aportaciones, Caja Rural Castilla-La Mancha y su Fundación responden a su compromiso social y responsabilidad con el ámbito de actuación donde operan, con la finalidad de respaldar a quienes más directamente padecen las consecuencias de la crisis.