Pese a que la crisis redujo a lo largo de 2011 en un 8% el gasto en cultura de los españoles y  que el IVA cultural incrementó en 2012 los precios finales de los espectáculos al pasar del 8 al 21%, cada día se despachan en España cientos de entradas para conciertos en directo. Y no precisamente a bajo precio.

Según un estudio realizado por  Calendapp, la aplicación española para la búsqueda de eventos a través del móvil, el precio medio de la entrada para un concierto en España es de 51 euros.

Ese precio es la media extraída de un estudio de los conciertos que se celebraran en los próximos meses en España.

Según el mismo informa, el precio más caro registrado corresponde a un concierto de Julio Iglesias en el Palacio de los Deportes de La Rioja cuyo precio máximo es de 330,70 euros, aunque se pueden encontrar entradas para ese concierto desde 56 euros.

En el extremo opuesto se encuentran conciertos como el que dará el grupo Hamlet en Villava (Navarra) y que cuesta 12 euros, o los dos que dará en Huelva y Cádiz y para los que los precios son de 14 euros.

Por lo general son los directos de los artistas internacionales los que alcanzan un mayor precio en las taquillas. Así, las entradas para los últimos conciertos que Justin Bieber y su extensa troupe de coristas, músicos y vocalistas ofrecieron en Madrid y Barcelona el pasado mes de febrero oscilaban entre los 60 euros y 90 euros, si bien los asistentes que desearan fotografiarse con el cantante podían llegar a pagar más de 300 euros.

La posibilidad de adquirir diferentes modalidades de entradas, alguna de ellas bautizadas como 'Premium' y 'Vip' y que incluyen prestaciones adicionales— es una práctica en alza.

También han surgido las iniciativas 'low cost'. Los rockeros de Bon Jovi, que actuarán el día 27 de junio en Madrid, abarataron sus precios para que "el mayor número de personas puedan disfrutar del show". Sus entradas para Madrid, ahora agotadas, podían adquirirse a partir de los 18 euros.