El senador de Izquierda Unida por Asturias en el Senado, Jesús Iglesias, ha criticado este jueves duramente la actitud del Gobierno central con respecto a la "crisis" del sector siderúrgico al futuro de las plantas que ArcelorMittal tiene en España. Lo acusa de "actuar como mera comparsa" y de únicamente "estar a la espera de que el rayo caiga en otra parte", en referencias a posibles cierres de factorías.

Así lo ha señalado en una rueda de prensa, en la que ha dado cuenta de la respuesta que ha recibido del Ejecutico central a su pregunta sobre el sector. Concretamente, el parlamentario de IU interpelaba al Ejecutivo para saber si conoce el avance del Plan Europeo de Apoyo del acero, que recientemente la UE ha presentado a la dirección de ArcelorMittal, y sus posibles repercusiones en España.

En su respuesta, el Ejecutivo enumera varios puntos incluidos en dicho diálogo entre la UE y ArcelorMittal, y promovidos por España. Uno de los más criticados por Iglesias es el que se refiere a la "política de empleo". El Ejecutivo invita a la Comisión Europea "a que analice las acciones que puedan ayudar a los trabajadores afectados por los cierres de plantas siderúrgicas".

"Se felicitan de que vaya haber ayudas a los trabajadores afectados por los cierres de plantas siderurgias", señala el senador de IU, quien entiende que "si estas ayudas hacen falta es porque se van a cerrar plantas". Ha mostrado su preocupación al respecto, porque "no se dice en dónde serán esos cierres, ni añade qué van a hacer (el Gobierno central) para que no se produzcan en España".

Así, ha recordado que en Francia, "cuando se cerraron plantas de Arcelor, inmediatamente hubo una reacción del Gobierno francés, y su presidente se reunión con los responsables de la empresa". "En un año y medio de Gobierno en España, no ha habido ningún encuentro entre el presidente de España o algún representante del Ejecutivo y ArcelorMittal", añade el parlamentario, para quien el Equipo de Rajoy "está esperando a ver si el rayo caen en otra parte".

Iglesias ha expresado sus dudas de que, como dice el Gobierno "las conclusiones elevadas a la Comisión Europea garanticen la posición española (en dicho Plan de Apoyo)". Critica el compromiso defendido por el Ejecutivo de impulsar la demanda interna en los sectores de automoción y construcción, porque este último "está deprimido y el Gobierno no tiene ninguna intención de contribuir, dado que las inversiones en obra pública caen en picado".

Además, reprocha al Ejecutivo central que considere las políticas de lucha contra el cambio climático como una "desventaja económica para la competitividad de la siderurgia europea".