El alcalde de la localidad pirenaica de Fago (Huesca), Miguel Grima, asesinado el 12 de enero de 2007, y los nueve alcaldes que llevan gobernando nueve mandatos consecutivos, serán galardonados por el Gobierno de Aragón.

El Consejo de Gobierno de la Comunidad Autónoma ha acordado este martes, a propuesta del consejero de Política Territorial e Interior, Antonio Suárez, conceder a Miguel Grima el Bastón Honorífico y a los nueve alcaldes que gobiernan desde 1979 la Banda Honorífica.

Miguel Grima recibirá el galardón a título póstumo. Esta distinción ha sido creada por Decreto 229/2012, de 23 de octubre de 2012.

Las bandas honoríficas han sido creadas a propuesta de la Federación Aragonesa de Municipios, Comarcas y Provincias (FAMCP) para reconocer la figura de los alcaldes en este momento de crisis.

Recibirán la banda mencionada los alcaldes de las localidades altoaragonesas de Banastás, Ángel Gracia; Bielsa, Antonio Escalona, y Sigüés, Daniel Salillas. En la provincia de Zaragoza los premiados serán los alcaldes de Alforque, Antonio Catalán, Épila, Martín Llanas, Plasencia de Jalón, Gregorio Benedí, y Mainar, Esmeraldo Marzo. Los alcaldes de la provincia de Teruel que llevan gobernando nueve legislaturas son Rafael Millán, de la localidad de Libros y Manuel Murciano, de Moscardón.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, el consejero de Política Territorial e Interior, Antonio Suárez, ha explicado que con estas distinciones se realiza "un reconocimiento a los alcaldes por su gestión durante años, su esfuerzo y trabajo".

En el caso de Grima, el consejero ha dicho que fue alcalde entre 1999 y 2007 y que "nos pareció a todos que debía reconocerse el trabajo que Miguel hizo por Fago".

Respecto a los premiados con las Bandas Honoríficas, Antonio Suárez ha expresado que "nunca se había reconocido expresamente todas las horas de trabajo que realizan los alcaldes por sus municipios". Ha agregado que "debido a la situación económica lo estamos pasando no muy bien".

Suárez ha recordado que "en Aragón casi todos los alcaldes no cobran ni un euro" y ha considerado que "trabajar no es incompatible con un reconocimiento".