La Comandancia de la Guardia Civil de Burgos ha celebrado este viernes el 169 aniversario de su fundación con un acto oficial en la Residencia Logística Militar 2 de Mayo, en el que el Teniente Coronel del Cuerpo en Burgos, Miguel Salom, ha destacado la importancia de adaptarse a los nuevos tiempos, dando cobertura a las exigencias que se plantean.

En este sentido, ha explicado que la persecución de los delitos informáticos es uno de los principales retos que se plantean en la actualidad, a la vez que ha destacado la importancia de mejorar los conocimientos técnicos, sin desvincularse de las raíces que han permitido la supervivencia de la Guardia Civil a lo largo de las décadas.

"Hay que seguir en la misma línea de trabajo y mejorar la actualización de los efectivos", ha aseverado Salom en declaraciones a los medios, antes de añadir que, en el caso de Burgos, "hay retos por delante porque siguen existiendo delitos que hay que esclarecer".

Al respecto, ha ensalzado el "espíritu de abnegación" que hace posible el trabajo diario de la Guardia Civil que, en el marco de la coyuntura económica actual, garantiza que los trabajos salgan adelante.

El acto conmemorativo, ha contado con la presencia del subdelegado del Gobierno en Burgos, José María Arribas; el vicepresidente 1º de las Cortes de Castilla y León, Fernando Rodríguez Porres; el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL), José Luis Concepción; y el presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Burgos, Antonio Miguel Méndez Pozo, entre otras autoridades políticas, civiles y empresariales.

Durante el evento, han sido condecorados y distinguidos tres oficiales, tres suboficiales y siete guardias civiles, a los que les ha sido impuestas la Cruz al Mérito de la Guardia Civil, la Medalla al Mérito Civil o la Cruz al Mérito de Protección Civil.

Asimismo, se ha procedido a la lectura de varios extractos de los decretos fundacionales de la Guardia Civil, entre ellos, uno firmado en 1844 por el Marqués de Peñaflorida y otro rubricado ese mismo año por el entonces Ministro de Guerra, Ramón María Narváez.

En sus orígenes, el Cuerpo estuvo compuesto por catorce tercios, integrados a su vez por 39 compañías de infantería y nueve escuadrones de caballería. Su primera plantilla se compuso de catorce jefes, 232 oficiales y una tropa de más de 5.700 hombres.

El 20 de diciembre de 1845 se aprobó la Cartilla de la Guardia Civil, definida como un código moral del Cuerpo cuyos preceptos se mantienen en la actualidad.