La reina Isabel II ha leído este miércoles en la Cámara de los Lores del Parlamento británico, un año más y en apenas siete minutos, los principales objetivos del Gobierno de David Cameron para el próximo curso legislativo. El programa incluye impulsar el crecimiento económico, crear una "sociedad justa" y llevar a cabo un fuerte control de la inmigración.

Cuando faltan dos años para las elecciones generales de 2015, el programa —que contempla trece proyectos de ley y dos borradores— pone énfasis en la inmigración, en un intento por contrarrestar el avance del antieuropeo y antinmigración Partido Independencia del Reino Unido (UKIP) en los recientes comicios locales en Inglaterra.

El Ejecutivo de coalición entre conservadores y liberaldemócratas quiere facilitar la deportación de delincuentes extranjeros, obligar a los caseros a verificar la situación de inmigración de sus inquilinos, reforzar las multas a las empresas que contraten ilegales y limitar el acceso de los extranjeros que vengan al Reino Unido para recibir asistencia de la sanidad pública.

El proyecto incluye también impedir que los inmigrantes ilegales obtengan el permiso de conducir, utilizado como forma de identidad junto con el pasaporte en el Reino Unido, al no haber carné de identidad.

Otro pieza legislativa es la reforma de las pensiones, que permitirá a los jubilados cobrar una pensión única semanal de 144 libras (167 euros), en lugar de las actuales 107 libras (124 euros), que se redondea con otros pagos por diversos conceptos.

Entre otras cosas, el Gobierno se ha comprometido a trabajar a favor de la permanencia de Escocia en el Reino Unido y a defender la voluntad de los territorios de ultramar a decidir su futuro, según el discurso, en el que se mencionó a las islas Malvinas y Gibraltar.

Esta referencia está vinculada al referéndum celebrado el pasado marzo en las Malvinas, en el que casi el 100% de la población votó a favor de conservar la soberanía británica, frente a las reclamaciones territoriales de Argentina.

El Gobierno británico también quiere combatir la evasión fiscal, apoyar a los países de Oriente Medio y norte de África y respaldar proyectos de infraestructura para crear empleo, como la construcción de la línea ferroviaria de alta velocidad entre Birmingham y Leeds (centro y norte de Inglaterra).

De blanco y con corona imperial, Isabel II, de 87 años, cumplió con el protocolo al pedir a un emisario desde el trono de los Lores que llamara a los comunes —diputados— para que escucharan su discurso, preparado por el Gobierno. Tras recorrer el largo pasillo que separa las dos cámaras, el emisario llamó con tres golpes a la puerta de los Comunes para comunicar a los diputados el llamado de Isabel II.

A pesar del avance del UKIP, en las prioridades del Gobierno no hay ninguna referencia a la convocatoria de un referéndum sobre la permanencia del Reino Unido en la Unión Europea (UE), que Cameron planea para 2017, siempre que gane los comicios. Tampoco se ha incluido el plan desvelado hace meses por el Gobierno para que la Policía pueda acceder a las listas de las direcciones de internet más visitadas por la gente.

Por otra parte, el Gobierno duplicará sus fuerzas de reserva, hasta 30.000, como parte de un plan para reducir el número de soldados profesionales en 2020. El Ministerio británico de Defensa ya había indicado que se haría una importante inversión en el entrenamiento de reservistas

En un acto sin precedentes, el príncipe Carlos, heredero al trono británico, estuvo presente en el Parlamento con su mujer, la duquesa de Cornualles, en lo que ha sido la primera vez que asisten juntos a este importante evento institucional.